Crimen en Puerta del Ángel: el asesino del rapero Parce Lean estaba en la habitación de al lado

El detenido es un joven de 22 años que apenas llevaba conviviendo con su víctima un mes. La Policía Nacional trata de dilucidar las causas del salvaje ataque a puñaladas

Asesinato en Puerta del Ángel: «Está todo el barrio atemorizado»

Eugenio, conocido artísticamente como Parce Lean, asesinado el martes ABC

Eugenio era un muchacho vivido, 29 años, nacido en Colombia, hijo adoptivo de Algeciras y desde hace más de un lustro asentado en Madrid para abrirse camino. Parce Lean, en cambio, era un tipo de calle, extravagante, lenguaraz, aspirante a 'showman'. Allí donde había un ... micro, una cámara o una tabla de 'skate' podía estar él, el chico del moño y las rastas, el del pendiente-llavero y el piercing en el septum. Cualquier bordillo o escalera de las plazas de la Luna, Santo Domingo o Colón era susceptible de ser sorteado: un 'kipflip', un 'manual', una pirueta imposible, lo cierto es que la vida de Eugenio, apodado artísticamente Parce Lean, no era una de esas vidas que pasan sin pena ni gloria. Hasta el pasado martes.

Ese día, los gritos y los «ruidos de muebles» dejaron paso a los golpes y las puñaladas a una hora donde los vecinos de la calle del Cerro Bermejo (en el barrio de Puerta del Ángel, distrito de Latina) no están acostumbrados a escuchar ningún sobresalto. A eso de las 3 de la tarde, el rapero amateur recibía hasta una docena de puñaladas a manos de su compañero de piso, un joven español de 22 años con antecedentes por violencia doméstica. ¿Los motivos del salvaje ataque? Una incógnita; ni bandas juveniles ni robo con violencia ni aparente trapicheo de drogas.

Con el agresor huido y el tercer inquilino de la casa ausente en ese momento, Eugenio tuvo fuerzas para asomarse a la ventana de la segunda planta y pedir ayuda a los vecinos, que llamaron de inmediato a los servicios de emergencia. Los primeros en llegar fueron los indicativos nacionales, que atendieron al hombre hasta la llegada del Summa 112. Para entonces, se había desplomado y había entrado en parada cardiorrespiratoria, de la que ya no saldría pese a las maniobras de reanimación cardiopulmonar practicadas.

Hasta el lugar también acudieron los agentes de la Sección de Delitos Violentos (DEVI) de la Policía Científica, encargados de la inspección ocular; y del Grupo VI de Homicidios, que recogieron algunos testimonios, entre ellos el trasladado por los propios 'zetas' de boca del fallecido, a la postre clave para la rápida localización del presunto autor.

Con el individuo identificado, un sujeto muy violento al que le consta una orden de alejamiento de su propia madre por violencia doméstica, los investigadores establecieron un discreto dispositivo de vigilancia en torno a la casa de ella, ubicada en el distrito de Chamartín. Tenían claro que tarde o temprano acabaría refugiándose allí, y no fallaron. En la madrugada del miércoles al jueves, apenas 34 horas después del homicidio, le dieron el alto en la vía pública para proceder a su detención; si bien reducirlo no resultó sencillo.

El sospechoso portaba un cuchillo sujeto en el cinturón y la emprendió a golpes con sus interlocutores. Por ello, está acusado de tres delitos: homicidio, atentado a agente de la autoridad y quebrantamiento de medida cautelar. Los dos compañeros apenas llevaban conviviendo en el inmueble un mes, sin que haya trascendido si se conocían de antemano o llegaron al piso de forma independiente.

Un altar en Malasaña

Parce Lean, que antes de alquilar una habitación en la vivienda donde le dieron muerte llegó a estar un tiempo pernoctando en la calle, formaba parte de Gedepe's, un grupo de rap surgido en la ciudad gaditana que acumula más de 1.500 suscriptores en Youtube. En Madrid, solía frecuentar la plaza del Dos de Mayo, a la que sus amigos y allegados acudieron esta semana para levantar un pequeño altar en su memoria. Sus canciones y videoclips se pueden contemplar en diferentes plataformas, donde él y su 'crew' cuentan con miles de visualizaciones.

En la capital, el joven ofrecía de vez en cuando pequeños conciertos en locales del centro y subía curiosas escenas a Instagram en las que mostraba su faceta más 'gamberra'. Subido al monopatín, pocos en su círculo podían hacerle sombra, hasta el punto de dejar boquiabierto a más de uno tras lanzarse, por ejemplo, sobre la barandilla de unas escaleras que salvan una pronunciada pendiente. Su agilidad para moverse le convertía, además, en un gran bailarín, una faceta de la que daba cuenta en otros de sus vídeos.

Estrafalario y movido, el malogrado pasaba «todas las mañanas para ir a trabajar» por un bar que se encuentra a pocos metros de su casa. Su repentina ausencia no ha pasado inadvertida en el negocio.

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