La «quinta» torre de la Castellana será el primer edificio de España con ascensores de evacuación

En pleno estado de alarma, el Área de Desarrollo Urbano concedió a principios de abril la licencia de obra definitiva , tras superar un doble reto: ejecutar y culminar mediante el teletrabajo un riguroso análisis de riesgos para dotarlo de las necesarias medidas de protección entre las que se encuentran, según indicaron a ABC fuentes del Área, las «tecnologías más avanzadas en el ámbito de la seguridad edificatoria».

El coloso tiene una forma de «T invertida», que lo configuran una torre de 34 plantas y una enorme base, con una huella de 17.219 metros cuadrados y 8 plantas. El rascacielos será la primera universidad con un campus vertical, en el que los veinte ascensores -nueve de ellos para el uso de emergencia- y las escaleras ejercerán de calles. A la complejidad propia de sus dimensiones se une la diversidad de usos que albergará: el Instituto de Empresa, el hospital Quirón, zonas comerciales, de restauración y de ocio, lo que implicará una ocupación media de 28.000 personas. «Las aulas se situarán en la torre, por lo que habrá una concentración de público muy superior a la que se produce en rascacielos convencionales, lo que ha convertido la seguridad de evacuación en todo un desafío técnico», subrayan desde la concejalía que dirige Mariano Fuentes (Ciudadanos).

Para lograrlo se han utilizado herramientas de ingeniería de seguridad contra incendios, como las simulaciones, que han permitido modelizar la evacuación del edificio. Los resultados obtenidos han señalado la necesidad de equipar a la torre con el doble de escaleras respecto de los rascacielos equivalentes. Este edificio «auto-protegido» , calificado así por Urbanismo por tener medidas de seguridad pasivas y activas, permitirá reducir el tiempo de evacuación total de la torre a 30 minutos si se realiza a través de cuatro escaleras especialmente protegidas. Pero, según las simulaciones realizadas, las personas con discapacidad podrán salir a través de los nueve ascensores en 12 minutos, en lugar de los 27 minutos que se tardaría conforme a los ascensores de emergencia que prevé el Código Técnico de Edificación.

También en la vanguardia está el sistema de ventilación de humos de incendio y salubridad del aparcamiento -con capacidad para 1.900 plazas - con que está dotado Caleido. En este espacio se instalarán ventiladores por impulso , un método que ya se aplica en los túneles y que permite extraer la polución y evacuar los gases rápidamente en caso de incendio. «Consiste en la instalación estratégica de ventiladores en puntos de entrada y salida de aire, generando así el fenómeno de inducción y extrayendo la masa de aire/humo hasta el exterior», explican los técnicos. Esta fórmula, además, no requiere la extensa red de conductos que implica la ventilación tradicional y conlleva un menor consumo.

En coordinación con los Bomberos, el edificio se ha diseñado para poder acoger a los vehículos de intervención más grandes con los que cuenta el Ayuntamiento, los de mayor capacidad de España. En concreto, podrá albergar el gran brazo articulado de 70 metros , que permitirá alcanzar una importante altura en las posibles labores de rescate y extinción en la torre. Para su uso se ha tenido que reforzar una gran superficie de forjado capaz de soportar una potente sobrecarga para desplegar estos gigantescos aparatos. Un ejemplo más de que la capital está preparada para abordar los grandes desafíos técnicos que supondrá Madrid Nuevo Norte .