La Policía disuelve una concentración en el barrio de Salamanca entre las quejas de los vecinos

Los hechos comenzaron pasadas las 20.30. La Policía Nacional disolvió una concentración en la que alrededor de un centenar de personas estaba incumpliendo la distancia de seguridad. Trece de los congregados en la calle de Núñez de Balboa fueron identificados y sancionados por no respetar las medidas de confinamiento.

Los agentes recibieron una llamada alertando de que se agolpaba gente frente a una vivienda con la música muy alta , situada en el numero 59 de dicha calle. Al llegar al lugar encontraron a 100 personas congregadas por lo que los policías, ante el caso omiso a disiparse del lugar por parte de algunas personas, pidieron refuerzos . Hasta el lugar acudieron agentes de la Unidad de Intervención Policial y de la Unidad de Prevención y Reacción, que identificaron y sancionaron a 13 personas.

La concentración de esta fiesta improvisada coincidió sobre las 21 horas con una cacerolada contra la gestión del Gobierno de España secundada por algunos vecinos desde sus balcones. Algunos de ellos criticaron la presencia policial al grito de «Libertad» o «Gobierno dimisión», tal y como se puede ver en algunas imágenes publicadas en redes sociales, porque pensaban erróneamente que estaban intentando impedir dicha protesta, algo desmentido, ya que la actuación de la Policía se debió solamente al incumplimiento del estado de alarma impuesto por el coronavirus. Según las mismas fuentes, los identificados no portaban ninguna pancarta o proclama política.

La versión de algunos residentes dista mucho de la ofrecida por la Policía. «Como todas las tardes, a las 20 horas uno de los moradores puso el himno de España y felicitó a otros vecinos que estaban de cumpleaños . Media hora después, llegaron siete coches de Policía que bloquearon la calle entre don Ramón de la Cruz y Ayala, que hicieron un cordón policial para impedir que pasáramos», explica Cristina Ruiz, testigo de lo ocurrido, que asegura que los agentes sacaron porras y pidieron a la gente que desalojara la vía pública. «No es verdad que al principio hubiese cien personas, había cuatro o cinco paseando. La gente salió después, a ver todo lo que estaba pasando. Nos increparon y amenazaron . Fue entonces cuando los vecinos gritaron "Gobierno dimisión". Creo que no debemos dejar que sigan avanzando y aplastando nuestro régimen de libertades », concluye la mujer, una de las identificadas.