Nuestra Señora del Tránsito: la arquitectura religiosa al servicio de la iniciación cristiana

El anteproyecto del templo se realizó en 1958 por iniciativa de Julián Laguna, entonces máximo responsable de la Comisaría de Ordenación Urbana de Madrid. El proyecto definitivo fue redactado en 1961. El 15 de agosto de 1965 se erigió como parroquia y comenzó su vida de presencia en un barrio que había evolucionado desde el poblado que da aire a la gran ciudad al hogar de la inmigración de los años sesenta y setenta.

Pero volvamos a la singular arquitectura que, según el citado estudio, asume «modelos nórdicos, principalmente de Saarinen y Jacobsen, y el conocimiento de las últimas tendencias litúrgicas alemanas, confirman el valor vanguardista de la iglesia de Canillas en el ámbito de la arquitectura religiosa española. La singularidad formal del edificio hizo que la habitual colaboración con artistas de vanguardia cobrara en este caso una importancia inusual. En su interior, de marcado carácter industrial, José Luis Sánchez realizó un Cristo de inspiración románica, mientras que las vidrieras y dibujos de Arcadio Blasco, todavía en clave figurativa, ocuparon todos los planos verticales».

El actual párroco de Nuestra señora del Tránsito, el sacerdote Antonio Fernández Montaña, ejemplo de atención y servicio, explica que el modelo de la propuesta de la arquitectura religiosa se basa en el movimiento bíblico y litúrgico que se desarrolló en Francia y en Alemania en los años anteriores al Concilio Vaticano II y que hizo posible la renovación conciliar. La teología del templo hace referencia a la bíblica Tienda del Encuentro, el lugar en el que habita Dios, su presencia sagrada. No en vano, hay traducciones del Evangelio de san Juan que inciden en esta dimensión decir que «el Verbo se hizo carne y puso su tienda de campaña entre nosotros», según la traducción literal.

De hecho, la presencia de las Comunidades del Camino Neocatecumenal, su impronta teológica y litúrgica, refuerzan esa continuidad de la aplicación de la auténtica reforma del Concilio Vaticano II en cuanto al diseño interior y al itinerario que se establece entre el nacimiento por el bautismo, engendrado en el seno de la Iglesia madre, baptisterio, la mesa del banquete eucarístico, del ágape, y la sede, la presidencia de la Comunidad. Hay que destacar que el frontispicio es una pintura original de Kiko Argüello , iniciador del Camino Neocatecumenal, camino de iniciación cristiana.

Otra curiosidad de este templo es la gran vidriera de la entrada que aunque parece un pantocrátor no lo es. Es la representación del Rey Frenando III el santo, con la espada y la corona de aspiración imperial. Originariamente se pensó denominar a la parroquia san Fernando, por el cercano poblazo de san Fernando, pero al existir ya una con ese nombre, dado que el párroco era oriundo de Zamora, le dio la denominación de Nuestra Señora del Tránsito.

Hay que destacar que el acceso principal la templo se hace a través de una preciosa y cuidada plaza que preside la imagen de la Virgen del Tercer Milenio. Una delicia de espacio de intersección entre los agrado y lo profano, entre el Reino y el mundo. En el otro lado del templo se encuentra el Catecumenio, un impresionante edificio que tiene en el frente exterior una cruz. Fue bendecido el conjunto arquitectónico el 14 de septiembre de 2016 por el cardenal Rouco Varela.

Acompañan al párroco en el trabajo del día a día los sacerdotes Gabriel Gil y Pablo Javier Lombardero . En esta parroquia caminan nueva Comunidades, de las cuales dos, fusión de cuatro, han terminado ya el Camino. Una de las incidencias pastorales con mayor relevancia es la relación entre la catequesis de iniciación cristiana –comunión- y la liturgia de la eucaristía dominical. La eucaristía como culmen del proceso del aprendizaje de la vida, de la experiencia cristiana. En la misa de niños hay que destacar la música y el servicio al altar con un nutrido grupo de monaguillos y monaguillas. Otra de las singularidades de la parroquia es la Adoración con el Santísimo según la forma que ha introducido Santiago Fusté, una Adoración que no se solo es Exposición, sino que es vida hecha amor ante el Amor.

Como no podía ser menos, Cáritas es uno de los baluartes de la parroquia. Atiende a más de cien familias. Trabajan en esta acción, que siempre es evangelizadora, de anuncio, un grupo de voluntarios, entre los que se encuentra una religiosa concepcionista, y una asistenta social.

La vida de esta parroquia es manifestación de la presencia de Jesucristo, que puso la tienda de su humanidad y de su divinidad entre nosotros.