Jesús de Medinaceli, la Soledad y el Santo Entierro cierran los pasos de fe

Simultáneamente, a las 19.00 horas, Medinaceli, el Cristo de Los Alarbarderos, el Divino Cautivo y el Silencio iniciarán su marcha desde diferentes puntos del centro de la ciudad. El Señor de Madrid cruzará el portón de la histórica basílica homónima, en la plaza de Jesús, para dirigirse a la calle de Alcalá, donde desarrollará buena parte de su recorrido.

La talla de Nuestro Padre Jesús Nazareno, del siglo XVII y anónima, guiará en el camino a Nuestra Señora de los Dolores en su Mayor Soledad, talla de Rafael García Irurozqui, de 1948. Esta procesión, una de las más antiguas y con más tradición en la capital, eleva el fervor popular por su estrecha relación con los madrileños.

El Nazareno, aupado por sus costaleros, irá acompañado de la Banda de la Asociación Musical La Lira de Pozuelo; mientras que junto a su Madre irá la Banda de Cornetas y Tambores Virgen Morena de Ocaña.

En andas, a la misma hora, saldrá por la Puerta del Príncipe del Palacio Real el Santísimo Cristo de la Fe, con talla de 2007 del autor Felipe Torres Villarejo. El Crucificado descansa en el templo desde que el pasado martes, en procesión, fuera trasladado desde la iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas, en la calle del Sacramento. El Cristo de los Alabarderos se adentrará en el viejo Madrid con la puesta de sol; paso a paso, al ritmo de las trompetas y tambores de la Guardia Real. Los anderos, con túnica azul y cíngulo rojo, serán sus pies en el cortejo.

Las otras procesiones que iniciarán su camino a esa hora son El Silencio y el Divino Cautivo. Esta última, en su segunda salida de la Semana Santa en apenas 24 horas. Si ayer recorrió las calles del barrio de Salamanca, con inicio y recogida en el Colegio Calasancio, esta tarde lo hará desde la iglesia de Santa Cruz, en la calle Atocha, para derrochar pasión y fe entre los fieles madrileños por las calles de Toledo, Cuchilleros o Mayor, entre otras, hasta culminar su regreso al filo de la medianoche.

El Silencio , con talla del Santísimo Cristo de la Fe, de Jesús Capuz Mamano, 1943, partirá de la iglesia homónima para avanzar en andas por las huellas del Madrid literario: Echegaray, Cervantes, Lope de Vega, Quevedo o el Convento de las Trinitarias.

Los pasos de María Santísima de los Siete Dolores (19.30 horas) y el Santo Entierro (20.30 horas) cerrarán la tercera estación de penitencia en la Semana Santa madrileña, una vez más reclamo de miles de personas. La primera, junto a la Unión Musical de Santa Cecilia de Dos Barrios (Toledo), saldrá también de la iglesia de Santa Cruz. Una hora y media más tarde, desde el mismo templo, el Santísimo Cristo de la Vida Eterna, obra del imaginero Jacinto Higueras, de 1941, marcará el horizonte a María Santísima de la Paz, de los talleres Agustín López Miraz.

La última estación de penitencia comenzará mañana a las 16.30 horas. El paso de Nuestra Señora de la Soledad y Desamparo saldrá bajo el dintel de la iglesia de la Concepción Real de Calatrava, en la calle de Alcalá, y enfilará su marcha hacia la Puerta del Sol.

Con el tronador avance de la Sección de Instrumentos de la Ilustre Cofradía de Jesús Atado a la Columna de Villamayor de Gállego, de Zaragoza, se encontrará con su Hijo, el Cristo Yacente, a la altura de San Ginés, en la calle del Arenal. El episodio, emoción y rigor, será el punto cumbre de la procesión.