Dávila se presenta a las primarias del PSOE a la alcaldía de Madrid sin Sánchez ni Franco

Dávila quiso quitar hierro al hecho de no contar con el apoyo con el que parte Pepu Hernández de la dirección del partido : «Siempre ha habido un candidato del aparato», dijo, para añadir que «cada militante puede expresarse sobre la persona que considere mejor».

Hasta la fecha, son cuatro las personas que han anunciado que se presentarán a las primarias del PSOE para la Alcaldía de Madrid: el primero fue el histórico dirigente socialista Manuel de la Rocha, ex alcalde de Fuenlabrada. Después, el propio presidente Pedro Sánchez avaló al ex entrenador nacional de baloncesto Pepu Hernández como candidato, que también iría a primarias. Chema Dávila fue el tercero, y la última en anunciarlo ha sido la militante de Chamartín Marlis González .

A Hernández le presentó como candidato el propio Pedro Sánchez, en un acto multitudinario en el que estuvo toda la plana mayor del socialismo madrileño. Dávila se presentó ayer casi en familia , en la agrupación socialista de Centro, hasta donde se acercaron amigos y militantes, portavoces de asociaciones vecinales y ecologistas, y también el candidato a la Comunidad, Ángel Gabilondo.

Gabilondo, que venía de una plantación de árboles en Meaques, acudió porque «prometió que iría a la presentación de todos los candidatos que le invitaran, y así lo hace », explicaron en su entorno. Un gesto elegante, muy de su estilo.

Dávila se presentó como alguien con deseos de hacer «algo distinto» y de generar entre los madrileños «ilusión» mediante «soluciones». Recordó que «no acabo de llegar» –ha sido concejal durante todo el mandato – «ni voy a marcharme» . Advirtió sobre la amenaza de «las tres derechas» que «unidas» como en Andalucía supondrán un retroceso «para las mujeres e inmigrantes y para toda la sociedad».

A su juicio, las primarias socialistas son parte de «la fiesta de la democracia que hay dentro del PSOE» y está seguro de que serán «modélicas». Pide, confiado en su conocimiento del terreno que pisa, que haya «debates públicos , cuantos más mejor, ya sea antes o después de recoger los avales necesarios».