El fiscal pide 6 años de prisión para el presunto colaborador de ETA, Fernández Larrinda

Así lo ha expresado el fiscal Vicente González Mota durante el juicio celebrado hoy a Fernández Larrenda, quien ha negado que las papeletas fueran suyas y ha apuntado que su entonces pareja -a la que prestó el vehículo donde se hallaron los boletos un día antes de ser detenido el 10 de agosto de 2008- "u otras personas", pudieron colocarlas allí, ya que el coche "lo utilizaba más gente". Según el representante del Ministerio Público, los talonarios pertenecen al entramado institucional de la banda terrorista y su objetivo era financiar actividades relacionadas con los internos, pero ha subrayado que "la financiación para el control de los presos de una organización terrorista no está permitida por las leyes".

En los "boletos de ayuda" figuraba el anagrama de la ilegalizada Askatasuna y en el reverso había un texto en euskera traducido como: "Con la ayuda que has aportado has dado un paso para garantizar los derechos humanos y la dignidad de los presos y huidos. Con el compromiso tuyo y de todos superaremos la dispersión y sus consecuencias". Para González Mota, que acusa a Fernández Larrenda de colaboración con banda terrorista y le reclama además que pague una multa de 6.000 euros, "no sólo se intuye, se sabe y se conoce" que las inscripciones que aparecen en los boletos son las de las ilegalizadas Gestoras Pro Amnistía y Askatasuna.

Se ha referido a la posibilidad apuntada por la defensa y varios testigos de que una de las inscripciones correspondiera al logotipo de Amnistía diseñado por Eduardo Chillida en 1976, lo cual "no mancha su actividad artística" y tampoco "criminaliza" al escultor, pero determinados símbolos como éste "pueden ser identificativos" y "se intuye" que se utilizan para reunir fondos.

Dos guardias civiles que participaron en la detención de Fernández cuando circulaba por la carretera BI-2405, a la altura del término municipal de Berriatua (Vizcaya), han señalado que el acusado les manifestó que se dirigía a las fiestas de Getxo para vender las papeletas , aunque se negó a firmar el acta de incautación. Un extremo que ha sido descartado por el propio Fernández Larrinda, que ha afirmado que no la firmó por "considerar falso el contenido". También han declarado dos amigos del acusado, Gaizka Ruiz y Haritz Irizar, que han coincidido en que cuando acudió a la cita que los tres habían fijado en Durango aquel día, les explicó "muy nervioso" que le habían intervenido las papeletas y que se negó a firmar el acta de incautación porque en ella "se le acusaba de algo que no entendía".