El enfrentamiento entre bateeiros y policías a las puertas de San Caetano dejó 16 agentes heridos

La concentración, que no había sido comunicada, se desmandó alrededor de las 9 de la mañana, cuando se produjeron los primeros incidentes. «Se realizó una intervención policial en respuesta al comportamiento violento», apuntaron las mismas fuentes, que cifraron en dos el número de personas detenidas y trasladadas a comisaría. Los arrestos provocaron, a su vez, el desplazamiento de un importante número de manifestantes hasta las inmediaciones del edificio policial, donde lanzaron petardos al grito de ‘libertad Lorena’ y ‘conselleira dimisión’.

A los detenidos, que dejaron la comisaría al cabo de casi ocho horas, tras prestar declaración, se les atribuyen dos cargos: atentado contra la autoridad y altercados públicos. Pasarán a disposición judicial en los próximos días, informó Ep.

Entre tanto, y la con la revuelta ya controlada, las agrupaciones policiales empezaron a hacer recuento de daños. Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) denunciaron que fueron hasta 16 los agentes heridos por el lanzamiento de piedras y los golpes recibidos durante el enfrentamiento. «La Policía Nacional se vio desbordada por una situación en la que los manifestantes rompieron el cordón de seguridad tratando de acceder a la verja. Con palos, piedras y petardos acometieron contra los agentes», explicó el portavoz del SUP en Galicia, que se personará como acusación particular en la causa porque «las imágenes hablan por sí solas y los compañeros se vieron acorralados en una situación bastante tensa», explicó a ABC Roberto González.

«Todas las reivindicaciones son legítimas, siempre y cuando sean pacíficas. No se puede romper el estado de derecho de esta manera», analizaron. En la misma línea, desde la CEP (Confederación Española de Policía) reprocharon la falta de efectivos para plantar cara «a la sinrazón y a la violencia actual». «Llevamos meses avisando de la falta de personal», lamentaron a propósito de déficit de efectivos en las comisarías de la Comunidad. «Esta mañana [por ayer] se han vivido en Santiago momentos violentos, y los violentos lo pagan siempre con la policía», recriminaron los afectados.

El vicepresidente primero de la Xunta, Francisco Conde, se expresó tras presidir el Consello, en ausencia por viaje institucional de Alfonso Rueda, a preguntas de los medios, para «lamentar los incidentes registrados» y «condenar cualquier tipo de violencia», informa Pablo Pazos. A partir de ahí, reivindicó que el «camino para resolver las necesidades de los diferentes sectores pasan necesariamente por el diálogo, el consenso y buscar alternativas que permitan dar esa solución». Conde ha apelado a la «empatía» de estos sectores, primero, para «evitar situaciones indeseadas» como la de este jueves, pero ante todo y «más importante», para que «pueda haber una voluntad de entendimiento» y «establecer esos canales de diálogo» que «por parte de la Xunta, están abiertos», ha asegurado. «El diálogo es el camino que hay que recorrer», ha insistido, para asegurar que hay «mano tendida» desde el gobierno gallego, que entiende que «sí es posible encontrar un punto de encuentro» en este conflicto.

El conflicto comenzó hace ya tres años, según asegura el sector bateeiro, y tiene que ver con la falta de mejilla, el nombre que se da a la semilla de mejillón. A comienzos de esta semana, lamentan, la Consellería do Mar «rectificó para mal» en lo que respecta a su sector, al volver a cerrar zonas de recogida de mejilla en las que también trabajan percebeiros.