Defensa le compra 14 sistemas antidrón a Indra y Escribano por 36,5 millones

A la licitación, negociada sin publicidad, tan solo se ha presentado la oferta de Indra y Escribano. «La UTE Indra Sistemas-Escribano Mechanical Enginniering es la única capacitada técnicamente para el desarrollo del proyecto desde el punto de vista técnico y se han negociado mejoras de interés para la Administración», ha argumentado Defensa en relación con la adjudicación de este contrato, informa Ep.

A mediados de este mismo año, Indra, Escribano y TRC firmaron un acuerdo de colaboración para presentar una solución para contrarrestar drones (C-UAS) y dar respuesta a las necesidades y requisitos de las Fuerzas Armadas en zonas de operaciones.

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De hecho, el acuerdo contemplaba la formalización de una UTE entre las compañías Escribano e Indra, con TRC como socio de esta última.

«Las tres empresas tienen dilatada experiencia en las tecnologías implicadas, habiendo trabajado en soluciones C-UAS testadas operacionalmente, tanto para el Ejército del Aire y del Espacio (el sistema CROW de Indra para dar cobertura a bases militares y eventos singulares); como para el Ejército de Tierra (donde Escribano colabora con TRC en el proyecto Cervus - solución desplegada sobre vehículos); así como en soluciones navales en las que colaboran actualmente Indra y Escribano para la Armada», detallaba entonces Indra en un comunicado.

La compañía presidida por Marc Murtra también considera que la unión e integración de sus capacidades puede aportar una «mayor protección y seguridad» a las Fuerzas Armadas frente a «las nuevas amenazas en el campo de batalla» mediante una solución integral C-UAS.

«Esta unión permitirá sumar capacidades críticas para trabajar en una solución mucho más completa y avanzada dirigida al cumplimiento de los requisitos de las Fuerzas Armadas teniendo en cuenta la especialización, experiencia operativa y conocimiento que se ha obtenido con los despliegues ya efectuados», añadía el comunicado.

En ese sentido, Indra y Escribano también abordan colaboraciones relacionadas con los sistemas antidrón, como el proyecto europeo Jey-CUAS, la propuesta para el proyecto coincidente BACO que se espera comenzar en 2025, o la participación en el futuro proyecto europeo E-CUAS que se lanzará igualmente en 2025.

Precisamente, Escribano incrementó la semana pasada su participación en Indra hasta el 14,3%, frente al 8% que poseía con anterioridad.

«La empresa, que ya era el primer socio industrial de Indra y su segundo mayor accionista solo por detrás de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) --que tiene un 28%--, ha incrementado ahora un 6% su participación, lo que refuerza su posición en la compañía», aseguró Escribano en un comunicado cuando anunció el aumento de su participación en el capital de Indra.

Escribano, que prevé cerrar 2024 con unos ingresos superiores a los 300 millones de euros (en torno a un 60% procedente de su negocio internacional), ha destacado también que con este movimiento amplía su «influencia» y responde a la «alta demanda global» de estaciones de armas remotas, sistemas de guiado de munición, soluciones antidrón, robots y sistemas de vigilancia de fronteras.

Escribano adquirió en mayo del año pasado un 3% de Indra, si bien para finales de noviembre de 2023 su posición se incrementó hasta el 8%, participación que se mantuvo hasta la semana pasada.

De hecho, a mediados de este año Escribano accedió al consejo de administración de Indra al hacer valer su 8%, que le daba derecho a un asiento en el máximo órgano de decisión de la empresa.

La entrada en el consejo de administración de Indra se concretó el pasado 27 de junio con el nombramiento del consejero delegado de Escribano, Javier Escribano, en calidad de vocal dominical.

En ese sentido, el 14,3% que Escribano posee de Indra le daría derecho a solicitar un segundo asiento en el consejo de administración de la compañía, compuesto por 16 miembros.