El SOS de un alcalde socialista para frenar las «agresiones» de un grupo de inmigrantes acogidos en un hotel

El Ayuntamiento del municipio alicantino, liderado por el socialista José Luis Sáez, ha lanzado una llamada emergencia tras los últimos sucesos registrados y ha pedido al Gobierno central una «respuesta contundente» para acabar con la espiral de violencia que viene sufriendo el pueblo costero de la comarca de la Vega Baja del Segura, con algo más de 17.000 habitantes que en verano puede llegar a superar los 100.000 visitantes.

Así, el consistorio ha mostrado su «más enérgica repulsa» con las agresiones sufridas en las madrugadas del 14 - durante la final de la Eurocopa- y 19 de julio, en las inmediaciones de un conocido pub, «provocadas por un reducido grupo de usuarios del programa de acogida de inmigrantes en el Hotel Parquemar».

Aclara el primer edil que la situación denunciada ante la Guardia Civil ya ha desencadenado en protestas y publicaciones de diferentes vecinos en redes sociales. Por ello, se ha puesto en contacto con la Delegación del Gobierno de la Comunidad Valenciana y la Subdelegación en Alicante para demandar una solución inmediata ante esta «lamentable situación».

De igual manera, el alcalde socialista confirma que la ONG encargada de la gestión del programa, CEPAIM, ha trasladado al usuario identificado a otro lugar fuera de la Comunidad Valenciana y se ha comprometido a reforzar la seguridad privada en el hotel para controlar los accesos y los horarios en la instalación hasta que finalice el programa este próximo 31 de julio.

Sáez recuerda que los agentes de Guardia Civil y Policía Local «se encuentran atentos a cualquier incidencia» e invita a la ciudadanía a denunciar «cualquier tipo de conducta o acto delictivo», al tiempo que ha enviado un «mensaje de tranquilidad» a sus vecinos, quienes han cargado contra él en redes sociales.

«Aquí ya no se puede veranear tranquilamente», «no es normal que estos grupos no tengan seguimiento y nos hayamos convertido en una ciudad sin ley» o «mis hijas tienen pánico de pasear por el pueblo», son algunos de los comentarios en el post del alcalde sobre los incidentes registrados durante las últimas semanas en Guardamar del Segura.

Por su parte, el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB), a través de su presidente Paco Ángel, ha denunciado la «grave y preocupante» situación que padece «lo que era hasta ahora un municipio tranquilo». «Desde la llegada de este grupo de inmigrantes se viene produciendo una serie de hechos delictivos violentos que están alterando muy gravemente la seguridad ciudadana y creando una alarma social muy importante», explicaba en una entrevista en Telecinco.

Asimismo, pide en un comunicado que las autoridades locales y el Gobierno central «tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad de todos y abordar estos problemas de manera efectiva». De hecho, sostiene que es «crucial» que todas estas acciones se lleven a cabo con un «enfoque humanitario», que «respete los derechos de todos los involucrados y promueva la cooperación y el diálogo entre todas las partes».

Recalca Ángel que es «imperativo» trabajar para asegurar un «entorno seguro y ordenado para todos los ciudadanos» ante un «desafío complejo que requiere una respuesta integral y coordinada por parte de las autoridades, la sociedad civil y la comunidad internacional». En paralelo, insta al Ayuntamiento de Guardamar a acabar con el «déficit» de policías locales, pues actualmente sólo cuenta con dos agentes por turno para cada día.

Actualmente, el Hotel Parquemar acoge a más de 200 migrantes de Mali y Senegal llegados desde Canarias. Mientras tanto, este martes el Pleno del Congreso de los Diputados debate la reforma de la Ley de Extranjería para el reparto obligatorio de menores migrantes no acompañados a otras comunidades, que previsiblemente no saldrá adelante después de que PP, Vox, Junts y ERC adelantan su 'no' a la proposición de ley suscrita por PSOE, Sumar y Coalición Canaria.