José Javier Sanchis, alcalde de Algemesí: «El río venía cargado. La Delegación de Gobierno dijo que me llamaría y sigo esperando»

—¿Cuáles son ahora las principales necesidades?

Necesitamos de forma urgente refuerzo de grúas y maquinaria pesada que venga de forma organizada con camiones bañera para cargar los residuos.

—Una semana después, ¿se han desplegado los suficientes medios?

—Estamos hablando de toneladas de enseres destruidos por todas las calles. Se desplegaron efectivos de la UME a los dos días de la tragedia ante un caos muy grande. Hay 180 personas por un lado, treinta del Ejército y el equipo de voluntarios. Pero, realmente, jornadas efectivas de trabajo son tres o cuatro, porque las primeras la prioridad era atender urgencias sanitarias o garantizar los accesos a la población.

—¿Se sienten amparados? ¿Ha recibido alguna llamada de administraciones superiores estos días?

—He recibido llamadas de todas las administraciones. Acompañado psicológicamente sí que me he sentido. Ese apoyo se agradece.

—¿Recibieron algún aviso del Gobierno o la Generalitat sobre el desbordamiento del río?

—A mediodía del martes, estaba en un puente del río Magro pendiente porque venía muy cargado, pero sin llegar a preocuparnos. Con excavadoras quitamos la acumulación de cañas que venía río abajo y que estaba taponando el puente. Estando allí recibí la llamada de la Delegación de Gobierno de la Comunidad Valenciana indicándome que estaban atentos a la previsión, que parecía que había un núcleo que se iba a reactivar, que estaban pendientes del río. Pregunté si tenía que lanzar una advertencia a la población. Me dijeron que iban a hacer una reunión de coordinación y luego me decían algo. Nunca recibí esa llamada. Tuvimos que buscarnos la vida y, ante las lluvias torrenciales, pedimos que cesara la actividad en los polígonos a las cinco de la tarde. Probablemente, eso evitó muchos problemas en zonas de alta inundabilidad. Tampoco nadie nos comunicó que iba a aliviar de agua el pantano de Forata.

—La exalcaldesa Marta Trenzano asegura que le llamaron a ella por error desde la Generalitat para advertirle de la situación a las siete y media de la tarde.

—Lo desconozco, pero tampoco me pasó el recado.

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—¿Coincide con la alcaldesa de Paiporta en que una «autoridad supramunicipal» debe asumir la coordinación?

—Coincido plenamente con ella. Los recursos municipales son absolutamente insuficientes y hemos perdido muchos en la riada. Hay administraciones superiores que llegan al sitio, ponen una carpa y dicen 'Puesto de Mando Avanzado'. Y a partir de ahí se coordina. Pero aquí estamos ingeniándonoslas con el acompañamiento de la UME, que se está portando muy bien con nosotros.

—¿Cómo valora la gestión que se ha hecho desde escalas superiores?

—Es evidente que han fallado cosas, cuando las capacidades de comunicación son tan grandes. Ha habido errores graves que se podrían haber evitado. Nos hubiera permitido reaccionar con mucha celeridad y evitar situaciones dramáticas. No puede ser que nos pasemos la pelota, que digamos que si quieres ayuda que la pidas. España está viendo cómo está Algemesí y , sin pedirla, la ayuda me está llegando de fuera de las administraciones. Para no ser injusto, también de los ayuntamientos de alrededor y de la Diputación. Yo no tengo que decirle ni al Gobierno de España ni a la Generalitat que, por favor, me mande maquinaria porque saben que la necesito. Que se muevan. Hay que saber si la Confederación Hidrográfica del Júcar, que depende del Ministerio, hizo lo que tenía que hacer para avisar de ese alivio de agua en zonas altas que iba a cargar más el caudal. Después, habrá que valorar cómo se gestionó la emergencia.

—¿Cómo afrontan lo que viene?

—Tenemos suficiente material para ir pasando. Pero nos enfrentamos a una temporada muy dura y estamos haciendo acopio incluso en almacenes que nos están cediendo otras localidades. Se ha perdido la producción de los campos, hay gente que no va a poder trabajar, los niños tardarán un poco en poder volver al cole... Hay plantas bajas en las que no queda nada y ayudaremos a los vecinos en lo que podamos para aliviarles económicamente.