El IVAM apuesta por la primera infancia con una sala blanda adaptada al público con bebés

La sala blanda del IVAM es un espacio con luz natural que utiliza colchonetas antideslizantes, cojines y pequeños bancos acondicionados, junto con juguetes de diferentes texturas, colores y formas para estimular los sentidos del bebé. De esta forma se crea un ambiente relajante y tranquilo donde se puede dar el pecho cómodamente y las niñas y niños pueden gatear y jugar.

El museo se convierte así en uno de los primeros centros artísticos en contar con un espacio permanente especialmente acondicionado para familias con bebés. «Los museos ofrecen oportunidades de aprendizaje que no se dan en otros entornos, contribuyendo así a un desarrollo integral y duradero en la primera infancia. El objetivo es abrir el IVAM a toda la ciudadanía, desde sus primeros años, brindando experiencias estimulantes», ha señalado la directora del museo, Blanca de la Torre.

La sala blanda es un proyecto del departamento de Educación y Programas Públicos del IVAM que pone el foco en las personas que están criando y quieren seguir disfrutando de propuestas de ocio cultural sin renunciar a estar con sus bebés.

En esta línea de trabajo del IVAM en el que la familia tiene un papel protagonista se incluye el programa Juguetoría, que propone un espacio de juego libre para niños y niñas de 0 a 4 años. Más de 3.000 personas al mes están disfrutando este verano de este taller confeccionado a partir de diferentes piezas de construcción que animan a explorar con luz, reflejos, volumen o texturas. El taller está abierto de martes a domingo, de 10 a 16, y de 16:30 a 18.30 horas, con reserva previa en la web del museo: www.ivam.es.

Las familias también pueden disfrutar en el IVAM de 'La Moguda del verano', un espacio de relax que cuenta con libros dirigidos a los más pequeños, con autores como Hervé Tullet, Eric Carle o Menena Cottin, y está ocupado en su parte central por un monstruo blando, sonoro y multicolor llamado 'La Criatura', una instalación efímera con tentáculos que reivindica un nuevo museo adaptado a la infancia, frente a la concepción tradicional de museo diseñado a la medida de las personas adultas.

Asimismo, el museo organiza las 'visitetas' dirigidas a las familias con bebés que deseen disfrutar de recorridos comentados por las exposiciones adaptados a sus necesidades. Así, en distintos puntos de la galería el museo despliega unas alfombras con juguetes en las que los pequeños pueden moverse con libertad durante el recorrido mientras el personal del equipo de mediación explica a los padres el contenido de la exposición.