Mercadona activa la cuenta atrás de su nueva web para la venta por internet

El plazo dependerá de la entrega y puesta a punto del almacén de 12.000 metros cuadrados desde el que se repartirán los pedidos, que la compañía ha bautizado en su jerga interna como «colmena» .

Mercadona lidera las ventas por internet de los supermercados españoles, con una cuota de mercado del 45% y unas ventas que el pasado año rozaron los doscientos millones de euros. Sin embargo, la empresa de capital valenciano ha escogido su ciudad de origen para lanzar Mercadona Tech , el nuevo canal de distribución «on line». Un proyecto liderado por Juana Roig , una de las hijas del presidente de la compañía, para cuyo lanzamiento -en el que trabaja un equipo de 150 personas- se han invertido más de veinte millones de euros. De ellos, doce corresponden a la «colmena» situada en el polígono Vara de Quart de la capital del Turia.

Fuentes de la empresa señalan que la entrega de las instalaciones determinará la fecha exacta del comienzo de las ventas a través del nuevo canal por internet, que marcará uno de los hitos en los cuarenta años de existencia de la compañía .

Según explicó Juan Roig durante la última presentación de resultados de la empresa, Mercadona se ha marcado el año 2018 como el ejercicio de «prueba» para su renovada apuesta por el comercio electrónico. Para ello, en las próximas semanas lanzará su nueva aplicación en determinados códigos postales de Valencia. En el resto, la venta por internet funcionará como hasta ahora.

La «colmena» servirá de nodo de distribución . Desde allí, unos camiones producidos ex profeso para la compañía con capacidad para mantener tres temperaturas distintas (fresco, seco y congelado) hará el reparto a los domicilios.

Si el modelo supera el test, a lo largo del año 2019 Mercadona comprará los terrenos para levantar sus «colmenas» en ciudades como Madrid, Barcelona y Sevilla a través de la llamada «mancha de aceite» con el que la empresa extendió su red de supermercados por toda España. La construcción de la naves se prolonga durante un año, conforme ha sucedido en Valencia. Ese el tiempo mínimo que tardará en extenderse el modelo.