Helados para que los animales combatan el calor, la solución del Zoo de Barcelona

Para evitar que las altas temperaturas afecten al bienestar de los animales los cuidadores adoptan medidas como la ampliación de los bebederos o la modificación de las dietas

Un mono disfruta de un helado en el Zoo de Barcelona ABC

C. Callau

Barcelona

Los animales no son ajenos al aumento de temperaturas del verano y, más, tras las intensas olas de calor que están asolando España en las últimas semanas. Por ello, el Zoo de Barcelona se ha puesto manos a la obra para evitar que ... el intenso bochorno veraniego afecte a la calidad de vida de los animales que habitan sus instalaciones. A los cuidados diarios por parte de los profesionales que se encargan de su bienestar, se han añadido otras medidas extraordinarias para velar por su salud.

Estos protocolos incluyen actuaciones para hacer frente a los picos más altos de calor. Uno de los factores que los profesionales del zoo consideran claves en los meses más extremos del verano es la alimentación. De tal forma que los cuidadores, además de controlar que los animales están bien hidratados, les preparan helados adaptados para a cada especie.

Estos helados tienen en cuenta las características y los gustos que tiene cada animal y por este motivo existe una variedad amplia de sabores. A partir de una base de hielo se añaden elementos como caldo, fruta, marisco, pescado, verdura o zumo. A los osos y a los monos les encantan los helados de caldo y de fruta congelada, a las jirafas el hielo con fruta y a las mangostas y suricatos los granizados de gusanos, han explicado fuentes próximas al Zoo en un comunicado publicado este lunes.

Otra de las acciones que desempeña el equipo de cuidadores es la renovación frecuente del agua de los bebedores y la ubicación de más unidades para facilitar la accesibilidad de los animales. Además, no solo se aplican medidas en los espacios para beber, sino que se renueva e intensifica la limpia de zonas de baño y lodo de algunas especies como los elefantes y los facóqueros. También se ayudan de aspersores y mangueras, como en el caso de los pandas rojos, el bisonte o el búfalo enano, entre otros.

Asimismo, con el aumento de las temperaturas se favorece que los animales puedan acceder a zonas con sombra, ya sea en cobijos o en el espacio interior de sus instalaciones, siempre con la idea de mantener la mejor ventilación posible y disponer del máximo número permitido de compuertas abiertas.

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