El tripartito subirá impuestos y bajará el sueldo a los funcionarios
Montilla anuncia una «rebaja ejemplar» de su nómina y la de los consellers _ Empieza la batalla por los recortes en el tripartito
Subida de impuestos y rebaja de los sueldos públicos, esa es la fórmula del Gobierno catalán para afrontar el nuevo recorte del déficit exigida por la Unión Europea a España tras el plan de rescate financiero aprobado el pasado lunes. Si a primera hora era ... el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien abría fuego en el Congreso anunciando una rebaja salarial del 5,5% para los funcionarios del Estado, a mediodía el conseller de Economía, Antoni Castells, confirmó que la Generalitat se sumará a esa línea. Y Montilla cerró el debate al anunciar, durante la sesión de control, que «habrá un recorte ejemplar de los sueldos, empezando por el del President».
El próximo martes el Govern sellará su nuevo plan de recortes, que según Castells abordará tres frentes: la revisión de los gastos de personal, con la rebaja de los sueldos públicos del 5% de media, aunque Montilla aseguró que será proporcional en función de las escalas salariales; «habrá que replantear algunas inversiones», añadió Castells, y «ralentizar algunas políticas»; y por último, las medidas fiscales.
Subida de un punto
El conseller de Economía anunció que el Govern subirá un punto Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentales, muy ligado al mercado inmobiliario. «El Gobierno ha aprobado la subida del IVA y este impuesto va en paralelo» argumentó Castells para justificar la subida. La Generalitat preveía ingresar este año 1.466 millones de euros por este concepto según el Presupuesto, casi un 30% menos que el año anterior.
El aumento de un punto no supone una cifra destacada en un presupuesto total de 39.660 millones de euros, pero esta medida a buen seguro servirá para contentar a sus socios de ICV, que ya dejaron clara en la sesión de control su oposición a la rebaja salarial a los funcionarios.
«Los más débiles son los que no tienen empleo o los que lo tienen inestable» respondió Montilla a la portavoz ecosocialista Dolors Camats, quien previamente le había acusado de «actuar sobre los más débiles» al dictado de los mercados. «Los mercados existen y es donde vamos a colocar nuestra deuda para poder seguir aplicando políticas sociales» recordó Montilla.
ERC, por su parte, dejó claro en el Parlament que están dispuestos a apretarse el cinturón, pero no a «aceptar el trágala de un Estado que no ha hecho los deberes», en palabras de su portavoz, Anna Simó. «Algunos llegan tarde» a las políticas de recorte, reconoció Montilla en referencia al Gobierno, pero dejó claro que el recorte en inversiones del Estado también afectará a Cataluña, aunque aseguró a sus socios que «el Gobierno cumplirá la Disposición Adicional Tercera» del Estatut, que fija para Cataluña el 18,8% del conjunto de las inversiones en infraestructuras. Y dejó claro que el corredor mediterráneo seguirá siendo la prioridad para la Generalitat en esta materia.
También el conseller de Economía advirtió que «el esfuerzo fundamental del recorto lo debe hacer quien tienen más déficit» tras recordar que un 9,2% del 11% del déficit español es imputable a la administración estatal.
Más allá del reparto de culpas entre gobierno central y autonómico, los próximos días se abrirá una encarnizada negociación entre los socios del Govern por ver dónde se aplica la tijera, es decir, en qué departamentos. A seis meses de las elecciones, nadie quiere asumir recortes en sus carteras, y de eso empezarán a tratar hoy José Montilla y Joan Puigcercós en el Parlament, después de que Castells insinuara ayer recortes en el departamento de Acción Social, en manos de la republicana Carme Capdevila. Aunque Montilla aseguró después que las políticas sociales no se tocarán.
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