El PP abandona una entrega de premios en Barcelona por una ofensa al Padrenuestro

En su intervención, Miquel (Lérida, 1960) leyó uno de sus poemas, en el que emula un Padrenuestro modificando el texto de una manera que el líder popular consideró ofensiva. «Mare nostre que esteu en el zel /sigui santificat el vostre cony , l’epidural, la llevadora...», arranca el «poema», que prosigue con un «facis la voluntat al nostre úter per sobre la terra».

« No es un tema de creencias religiosas sino de respeto, y aquí ha faltado. Con los católicos se atreven a todo, pero seguro que su libertad no la ejercen igual mofándose del Islam o los musulmanes», explicó Fernández para explicar las razones que le llevaron a abandonar el acto.

De manera reciente, el líder del PP catalán, Xavier García Albiol, también abandonó un acto, en este caso la inauguración de la Línea 9 del Metro, al considerar que el presidente catalán Carles Puigdemont mintió al cuestionar las inversiones del Estado en infraestructuras.

Fernández también ha avanzado que el PP pedirá el cese de «la persona que, por acción u omisión, consintió que en la pauta del acto se incorporara ese mal llamado poema, claramente ofensivo para muchos barceloneses, y fuera de lugar para la inmensa de los ciudadanos sean o no católicos».

Esta mañana, el obispo de Terrassa, Jose Ángel Saiz, ha tildado de «blasfemo» el poema que leyó anoche la poetisa Dolors Miquel durante la entrega de los premios Ciudad de Barcelona en el Ayuntamiento de Barcelona y se ha preguntado hasta cuándo aguantará la paciencia de los católicos.

En un tuit, el obispo ha escrito hoy «En el Ayuntamiento de BCN leen un texto blasfemo. Recuerdo a Cicerón: «Quousque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?», que traducido viene a decir «cuánto tiempo abusará usted de nuestra paciencia».

También el exalcalde Barcelona, Xavier Trias, ha considerado un «error institucional» el poema y ha asegurado que el gobierno de Ada Colau «confundió el papel que ha de hacer una institución con la libertad de expresión" y optó, una vez más, por la transgresión y que él le hubiera aconsejado «no hacer este trocito».

Xavier Trias ha explicado que al final de la ceremonia le dijo a la alcaldesa que la lectura le había parecido una «equivocación" porque cuando se organiza un acto institucional «según qué expresiones están fuera de tono».

«Le dije que si harían una cosa así afectando a otras religiones. ¿Verdad que no? Hay que ser muy respetuosos», ha explicado Trias.