La familia Jubany pide a los encubridores del crimen de Helena que rompan su silencio

Este indicio lo confirmó una pericial de la policía científica, tras determinar que el investigado, Xavier Jiménez , es autor de parte de los textos que dejaron en la puerta del piso de Helena junto a dos bebidas -un zumo y una horchata-, adulteradas con benzodiazepinas. El mismo sedante con el que la drogaron antes de arrojar su cuerpo desde una azotea. Por este motivo, el imputado tendrá que declarar ante el Juzgado de Primera Instancia de Sabadell el próximo 22 de abril . Debía hacerlo este viernes, pero la renuncia de su abogado ha llevado a retrasar su comparecencia.

Jiménez, al igual que los primeros investigados por el crimen, Montse Careta y su entonces pareja, Santi Laiglesia, era miembro de la Unión Excursionista de Sabadell (UES), entidad de la que Helena también era socia. Pero Careta se quitó la vida en prisión, y Laiglesia no llegó a ser detenido. Una instrucción plagada de errores -extremo que han confirmado, incluso, quienes participaron en la investigación- y el silencio del entorno de la UES, conllevó el sobreseimiento del caso en 2005.

El empeño de la familia para reabrirlo les llevó a analizar al disco duro del ordenador de la joven bibliotecaria , y así localizaron los correos de Jiménez. Unas comunicaciones que se unen a lo que la propia Jubany transmitió a una amiga días antes del crimen: que sospechaba que este mismo individuo le había dejado los anónimos porque estaba enamorado de ella.

También se suman las contradicciones en las coartadas de los sospechosos para la noche del asesinato . Uno de ellos, tal y como recoge el instructor en su auto, es Jaume Sanllehí, que modificó su declaración para hacerla coincidir con la de Xavier Jiménez, tal y como ha recordado la familia este miércoles en un comunicado.

El otro presunto encubridor es Francesc Macià, de la Secció Natura de la UES, quien mantuvo contactos telefónicos con todos su integrantes para «coordinar» sus declaraciones ante la Policía. «A las personas que en aquel momento encubrieron las falsas coartadas de los implicados, las emplazamos a explicar todo lo que saben. Estamos ante un crimen sin resolver y hay gente que tiene información», reprochan los Jubany.

Los allegados de la víctima recuerdan que «tras tantos años de impunidad», no tienen «ninguna duda» de que los asesinos de Helena son del entorno de la Unión Excursionista de Sabadell. «Ahora ya es una cuestión de humanidad. Continuar callando es encubrir un asesinato. Es un feminicidio y no podemos permitir que quede impune », subrayan.

Cabe recordar que, salvo para los que han sido imputados durante estas dos décadas -Laiglesia, Jiménez y Ana Echaguível- el crimen ya ha prescrito. Es decir, queda extinguida la responsabilidad penal, excepto para aquellos que hayan sido investigados en algún momento del procedimiento.