Borràs acusa a Aragonès de «actitud indigna» por no defender a Puigdemont ante los eurodiputados que investigan el caso Pegasus

En una carta, fechada este mismo miércoles y consultada por ABC, la presidenta suspendida del Parlamento de Cataluña -que utiliza el membrete oficial, a pesar de estar suspendida de sus funciones tanto como presidenta como de diputada autonómica- lamenta la actitud del presidente de la Generalitat, que ayer compareció ante los eurodiputados que investigan el espionaje mediante el 'software' Pegasus a independentistas y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y tres de sus ministros.

Según Borràs, «una de las primeras obligaciones» que le corresponde al presidente autonómico «es la defensa de las instituciones de Cataluña» y, entre estas, está la de la Presidencia de la Generalitat, que ahora ostenta Aragonès (ERC) y que en 2017 estaba en manos de Puigdemont (Junts). Por esto, Borràs le traslada al líder de ERC «la profunda decepción y la enérgica protesta» por su «indigno comportamiento» ante los eurodiputados. Sobre todo, por no rebatir los argumentos del exministro Zoido (PP), que para la presidenta de Junts son «falsos argumentos».

Zoido, durante sus intervenciones el lunes y el martes, justificó el espionaje llevado a cabo por parte del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) contra Puigdemont, no por independentista sino por llevar a cabo una iniciativa ilegal, como fue la del referéndum de secesión. Borràs, ante la pasividad de Aragonès, considera que este protagonizó «una actitud indigna» de la responsabilidad que ostenta, al dar a entender, en opinión de aquella, que el espionaje al presidente de la Generalitat está justificado en «un determinado contexto».

Noticia Relacionada

Pegasus encalla en el juzgado por falta de respuesta de Israel a la Audiencia Nacional

Isabel Vega

La misión de la UE sobre el espionaje arranca con un plantón de Vox y el Gobierno de perfil

En esta línea, la líder de Junts aprovecha la misiva para recordarle que los eurodiputados no se han reunido, en su estancia en España, con «víctimas» de otros partidos que no sean de ERC -el martes intervinieron, además de Aragonès, la consejera de exteriores, Meritxell Serret, y Ernest Maragall, candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona-. «Las víctimas de este inaceptable caso de espionaje -entre las que, lamentablemente, también me incluyo- abarca un espacio transversal que afecta también a la sociedad civil», añade Borràs.

Le reprocha al presidente de la Generalitat que no haya tenido en cuenta este aspecto: «Todas las personas, entidades y estamentos que forman parte de este colectivo merecen la defensa firme de sus derechos democráticos por parte de la primera autoridad del país». Y le invita a «reflexionar sobre la necesidad de preservar el riesgo de afrontar desde ópticas partidistas la lucha contra la represión que el Estado español continúa ejerciendo sobre el movimiento independentista y del que el espionaje político es uno de los episodios más escandalosos».