Y tras responsabilizar al Gobierno autonómico de tener que dar salida a casi un tercio de su plantilla, su dirigente en Castilla y León, Faustino Temprano, pidió ayer al consejero de Empleo, Mariano Veganzones, que «cuente» con esos «verdaderos profesionales» para cubrir los 150 puestos de orientadores para el Ecyl que Veganzones anunció que contratarán.
El acuerdo también supone un «esfuerzo» por el resto de la estructura, que se congela el sueldo, aunque «no» es suficiente para cubrir las indemnizaciones, con una media de 25 días por años trabajado, y también tirarán de lo que aportan. «Volvemos a a vivir exclusivamente de las cuotas» de los afiliados, señaló Temprano.
Temprano destacó el «esfuerzo» de la organización y, sobre todo, de su plantilla, para cerrar este acuerdo, que va ligado a una congelación salarial en 2023. Asimismo, constató que el sindicato se compromete a reincorporar al personal afectado si se reanudaran los programas.
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