Tudanca ofrece a Mañueco «sacar una ley de memoria democrática sin Vox»

«Nunca antes en la historia de esta comunidad un presidente había recibido tamaña reprimenda de la ONU. Le debería dar un poquito de vergüenza», le espetó el dirigente socialista para quien el informe es un «varapalo histórico» en el que se recoge que la proposición de ley «invisibiliza las graves violaciones de derechos humanos durante la dictadura franquista». Afeó que Mañueco durante su intervención «haga gracietas y chistecitos», ya que el presidente dijo que esperaba del burgalés que cantase «un tango», en alusión a la polémica de estos días con el presidente argentino. Tudanca acabó por ofrecer al jefe del Ejecutivo autonómico «sacar una ley de memoria democrática que cumpla con todas las garantías de los tratados y derechos internacionales y sin Vox». «Puede volver al redil, a la derecha civilizada del señor Ruiz Medrano y de Juan Vicente Herrera, también de la mano del PSOE», zanjó el portavoz socialista.

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Pero el dirigente del PP, en su segunda intervención, obvió el guante de Tudanca, aunque previamente mantuvo «no tener constancia de que la ONU haya realizado advertencia alguna» y acusó al socialista de leer «lo que le han escrito en Ferraz». Así que calificó sus afirmaciones de «batería de bulos, medias verdades y tópicos de los argumentos de Pedro Sánchez». «De los dueños de bulos y fangos solo se puede esperar bulos y fangos», insistió Mañueco, quien desacreditó a los llamados relatores de la ONU porque «ni forman parte de su organización ni expresan su opinión», por lo que se preguntó si ese documento «se ha hecho por encargo de Sánchez». Terminó por acusar a Tudanca de «vender una cortina de humo con mucho teatro y ruido buscando argumentos para crear crispación, división y enredar».

Fue el portavoz de Soria ¡Ya!, Ángel Ceña, el encargado de tocar tierra, la suya, para reclamar a la Junta ayudas al funcionamiento de autónomos y empresas en su provincia y de exigir para ella las mismas que el PP pide en Madrid. Y ya puestos, aprovechó para «bajar de la nube» a Mañueco por su «arrogancia electoral» cuando «el PP ganó en Soria todas las elecciones hasta 2019, cuando le presentaron a usted». Mañueco insistió en que la «ventanilla» a la que tienen que acudir con sus demandas de una financiación diferenciada para la provincia es a la del Gobierno de España.

El presidente terminó su presencia en el pleno con la respuesta al procurador del Grupo Mixto, Francisco Igea, que le interpeló sobre si había dado órdenes para realizar transplantes cardíacos y pulmonares en el Hospital de Salamanca, una decisión que «pone en riesgo la supervivencia del programa» que se realiza en el Clínico de Valladolid e, incluso vidas humanas. Mañueco, que no empleo en su respuesta todo el tiempo disponible, defendió la decisión de ampliar los transplantes al centro salmantino porque «ganará Valladolid», que coordinará, «y también Castilla y León», que se beneficiará de «una alianza estratégica».