Tratan de impedir a sillazos la detención de un hombre en busca y captura desde hace un año

Los hechos han ocurrido pasada la una de la madrugada en la calle Cuclillo, donde la Policía Nacional se ha personado para proceder a la detención de Alejandro G. E., que ha intentado huir empujando a los agentes para escapar por la puerta de su domicilio, lo cual ha obligado a pedir refuerzos dada la «agresividad» que mostraba con patadas, cabezazos y puñetazos.

Según relatan fuentes policiales, al verse reducido ha comenzado a pedir a los vecinos que le ayudaran a evitar la detención diciéndoles que salieran de casa, como, al parecer, así han hecho, aglutinándose en la calle una treintena de personas que habrían tratado de frenar a las dotaciones. Incluso han tenido los agentes que parapetarse en el portal al imposibilitar los familiares la salida.

Allí han esperado a la llegada de seis vehículos policiales a escena con doce agentes de refuerzo que han ido abriendo el camino hacia el vehículo policial y conteniendo a las personas concentradas que volcaban contenedores y «se dirigían hacia ellos en actitud hostil con bastones y palos». Uno de ellos incluso ha arrojado presuntamente una silla contra los agentes, una supuesta agresión por la que ha sido detenido esta mañana.

Cinco agentes han resultado heridos de carácter leve durante la intervención como consecuencia del forcejeo con el 'Rini' que pese a la trifulca ha sido detenido y tanto él como su familiar han pasado ya a disposición judicial.

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Con un largo historial, a Alejandro G.E. se le atribuye la supuesta pertenencia a la 'banda del BMW' y una presunta implicación en un tiroteo en 2019, en la confluencia de la avenida de Palencia con Amor de Dios, entre dos grupos. Sobre él pesan nueve reclamaciones judicial de ingreso en prisión y detención y personación, todas ellas por delitos contra la seguridad vial: conducción temeraria, sin permiso o bajo a influencia del alcohol y drogas.

Hace menos de un año, su hija fue también detenida tras cuatro en busca y captura en su domicilio el el barrio de Delicias. En este caso, ante la presencia de los agentes, ella misma abrió la puerta y se entregó.