«Los productores independientes han desaparecido en el cine español»
Victoria Abril, Andrés Vicente Gómez, Gutiérrez Aragón y Colomo reciben las Espigas de Honor en la Seminci
La actriz Victoria Abril, el productor Andrés Vicente Gómez, y los directores Fernando Colomo y Manuel Gutiérrez Aragón
Reunir a tres ases de la historia reciente del cine español permite hacer un repaso de lo bueno y bonito que se ha hecho en las últimas décadas, pero también tiene el peligro de que le saquen los colores a los puntos débiles de nuestra ... industria. Es lo que ocurrió ayer en la rueda de prensa que reunió a Manuel Gutiérrez Aragón, Andrés Vicente Gómez y Fernando Colomo, una hora antes de que junto a Victoria Abril fueran los protagonistas de un sentido homenaje en la Semana Internacional de Cine de Valladolid, que les entregó sendas Espigas de Honor.
«No es que haya renunciado a hacer cine en España, pero es difícil hacerlo en este momento, sobre todo lo que un productor quiere hacer», reconoció Andrés Vicente Gómez, detrás de títulos tan señalados como 'Belle Époque', la segunda producción española galardonada con un Oscar y otros tantos que han marcado el devenir de nuestra cinematografía más reciente como 'El día de la Bestia' o la propia 'Jamón Jamón', cuyo 30 aniversario conmemora también el festival.
Hace tiempo que Gutiérrez Aragón dejó la industria. Su última película, 'Todos estamos invitados', la rodó en 2007. «Ahora escribo novelas, que es más barato», sentenciaba, pese a reconocer que el cine ha sido su «vida» y que «uno puede dejar de hacer películas, pero no deja de ser cineasta». Para el académico (ocupa el sillón F que dejó José Luis Sampedro) , que se permitió hablar en nombre de los presentes, «uno de los problemas» del cine español es que se ha restado importancia a la figura del productor, cuando era quien «muchas veces imaginaba o comenzaba un proyecto». Hoy, «los productores independientes han desaparecido del cine español e internacional y han sido sustituidos por gente de la televisión o las plataformas». ¿Y la consecuencia? Se realizan proyectos «que pasan por una serie de filtros, donde caen en muchas manos y no terminan siendo de nadie». Para los homenajeados ayer, la llegada de las plataformas no significa la «democratización» de la industria. Sí que es más «barata», pero también se ha «desilustrado».
Andrés Vicente Gómez insistió, al respecto, en que lo que hace falta es «una legislación donde los productores y creadores tengan acceso a la financiación. Y eso se consigue con unos canales regulados» y no dejándose influenciar por «presiones de grupos absurdos» y las «inseguridades» de unos ministros que «han intentado complacer a mucha gente».
«Ahora las subvenciones son para las plataformas», añadía Fernando Colomo, para quien «hay tal cantidad de películas, que se ha producido un barullo, un ruido...». «Me voy a dar de baja en Netflix porque me paso media hora indagando qué película quiero ver», confesaba también el cineasta madrileño, también productor -estuvo detrás del debut de Fernando Trueba en la dirección, con 'Ópera Prima', allá por los años 80-. Recordó que «hacer una película es crearla, rodarla y exhibirla» y hoy por hoy, «las películas no tienen acceso a la exhibición».
Pero la jornada de ayer no fue solo de reivindicación, también de reconocimiento a cuatro personalidades imprescindibles, cada uno en su campo, en las últimas cinco décadas del cine español. Llegó una hora más tarde sobre el escenario del Teatro Calderón y con una sonora ovación a todos los homenajeados por parte del público asistente a la gala.
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