El Patio Herreriano reivindica la figura del bailarín Vicente Escudero como «el antecedente de las artes vivas»
El museo de arte contemporáneo reúne medio millar de obras entre pinturas, fotografías, vestuario, películas y cartelería en «la más grande de las exposiciones dedicadas hasta la fecha» a un artista vallisoletano
'Érase una vez': El Museo de Escultura mira hacia su pasado para «proyectarse al futuro»
VALLADOLID
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónDel ingente legado sobre el bailarín Vicente Escudero que la familia Fraile depositó en su día en Museo de Teatro de Almagro y el Centro de Documentación del INAEM(Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música) aún queda mucho material por analizar. ... Por ello, indagar en él permite descubrimientos como una película que el propio artista grabó en 9 milímetros sobre un concurso de baile infantil con los gitanos en el Sacromonte, la grabación en un disco de pizarra de la 'Danza del Molinero' o incluso el único registro sonoro que hay de una de sus clases.
Es parte del material inédito que se puede ver en la exposición 'Coreografía, bailes y danzas de Vicente Escudero', que desde este viernes y hasta el próximo 10 de septiembre se puede ver en el Museo de Arte Contemporáneo Patio Herreriano, que pretende reivindicar la figura del vallisoletano como «uno de los grandes artistas plásticos de la Generación del 27» y un claro «antecedente de lo que hoy se llaman artes vivas».
Así se ha referido a él el gran entendido en el artista Pedro G. Romero, comisario de esta exposición que reúne medio millar de obras entre pinturas, dibujos, fotografías, objetos, vestuario, películas y documentos. La muestra se trata de la «más grande dedicada hasta la fecha a un artista», ha destacado el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, recordando los comienzos de este artista «autodidacta» reconocido hoy como «un genio de la danza» y «una leyenda del baile español».
«Queremos que Valladolid se enorgullezca de un artista extraordinario y pensábamos que este era el momento», ha reflexionado Javier Hontoria, director del Museo Patio Herreriano, coproductor de la «ambiciosa» exposición junto al Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla y al Centro Federico García Lorca de Granada. De hecho, fue en este, a cuyo frente está Laura García-Lorca, sobrina del poeta, donde comenzó a gestarse esta exhibición en el marco del Centenario del Concurso de Cante Jondo.
Cinco capítulos ('Lo nuevo y lo viejo'; 'El amor brujo, El Molinero'; 'Bailes flamencos primitivos', 'Seguiriya' y 'Decálogo' hilan la exhibición a través de tres salas en las que se quiere poner de manifiesto, ha detallado el comisario, que Vicente Escudero «construyó todo un imaginario» y fue un «moderno», un adelantado a su tiempo. Prueba de ello son, por ejemplo, sus dibujos y pinturas que ver con sus «notaciones coreográficas». «Él cuando ya no bailaba, lo hacía de otra manera, que era dibujando con sus pinceles y ceras». Estas adquieren protagonismo en la sala 2 del museo, donde junto a los mencionados discos de pizarra se pueden ver también algunos de sus instrumentos.
Sobre el artista ha recordado el comisario que construido como un artista de la novedad y la vanguardia en el París cosmopolita de los años veinte, se reinventa como un artista de la tradición desde los años 30. «En París era considerado más o menos como un Dios mientras en España se le ponían peros», lo que hizo al vallisoletano comenzar a presentar «todas esas innovaciones» como «fruto de la tradición». «Él reclamaba el flamenco primitivo y salía a escena y se ponía a bailar seguidillas y realmente estábamos ante una pieza de danza contemporánea».
Gades-Saura, una extraña pareja de baile
Julio BravoCoreógrafo y cineasta firmaron tres películas que resultaron fundamentales para la modernización y difusión internacional del flamenco
Entre el material expuesto destaca también la cartelería y algunas obras sobre el artista realizadas por el también vallisoletano Eduardo García Benito y Picasso. En este sentido Pedro G. Romero ha destacado la relación que tuvo con algunos artistas como Miró o Marche Duchamp, «el artista más importante de la modernidad», con cuyo cuñado compartió estudio en París y del que poco se sabía en España hasta que fue invitado por Dalí en Cadaques.
Curioso de ver es también algunas notas manuscritas del propio bailarín que se pueden observar en las vitrinas. «No hay nada más fácil que la palabra arte para hacerse artista. Que viva la Pepa y quien la inventó», se puede leer en una de estas anotaciones.
Para María Ángeles y Julio César Fraile, sobrinos nietos del bailaor, presentes en la inauguración, esta exposición supone «una satisfacción» porque permite «mantener viva en el siglo XXI toda su obra y todo su pensamiento».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete