Montelarreina: el Ejército como motor económico

La reapertura del campamento militar generaría una inyección de 42,7 millones al año, el 1,16 por ciento del PIB provincial

Restos del cuartel del antiguo campamento militar M. ÁLVAREZ

Alberto Ferreras

28/05/2021
Actualizado a las 08:31h.

Desde que a principios de 2019 el máximo responsable del Ejército de Tierra anunciara en Zamora la intención de revitalizar el antiguo campamento militar de Montelarreina, ubicado en el término municipal de Toro, para recuperar su uso castrense y asentar en él un batallón, la ... provincia sueña con que esa declaración de intenciones mantenida en el tiempo se haga realidad. La iniciativa, para la que se ha pedido la implicación de todas las instituciones, se contempló como un proyecto que además contribuiría a asentar población y generar riqueza en el medio rural y pondría su granito de arena para frenar la despoblación en la denominada España Vaciada.

Ahora, un estudio hecho público por el Ministerio de Defensa a través de la revista oficial del Ejército de Tierra de este mes de mayo, cuantifica la repercusión económica de esa reapertura y confirma que el proyecto de Montelarreina haría que el estamento castrense pasase a ser uno de los motores económicos de la provincia. Paradójicamente, en la actualidad, Zamora es una de las ocho provincias españolas en las que no está asentada ninguna unidad militar terrestre.

Investigación universitaria

El estudio, publicado por el coronel de Intendencia y diplomado de Estado Mayor Vicente Lunar Bravo, analiza los datos socioeconómicos de Zamora, los cálculos de Defensa sobre costes y gastos por unidad militar y aplica un trabajo de investigación anterior de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona sobre el impacto de las actividades propias del Ministerio de Defensa para realizar una estimación fundamentada de lo que representaría para la provincia la llegada de unos 1.100 militares.

Los costes de esos dos batallones que llegarían a la provincia junto a una unidad de servicios de acuartelamiento ascienden a 1.789.260 euros anuales, eso sin contar con la generación económica de los 85 millones de euros que se estima que costaría adecuar Montelarreina para albergar la unidad militar. A esos costes hay que añadir 762.230 euros al año de impuestos recaudados. A los efectos económicos directos hay que añadir otros indirectos de primer y segundo orden y los inducidos, y tener en cuenta que por cada mil euros de gasto del Ejército se generan 1.435 euros de PIB y 426 euros más de recaudación impositiva, mientras que por cada cien militares se generan 45 puestos de trabajo indirectos.

Sumando todo ello, la repercusión económica anual en Zamora de contar con una unidad militar se estima en 42.717.690 euros anuales. Eso supone el 1,16 por ciento del Producto Interior Bruto provincial. Si se compara con la contribución al PIB del Ejército de Tierra en las distintas provincias de España en las que está asentado, Zamora se situaría como segunda provincia con mayor impacto en su PIB tras Segovia (1,22%) y por delante de Badajoz (1,14%), aunque también es mayor la repercusión en su PIB en las ciudades autónomas de Melilla (11,39%) y Ceuta (10,36%).