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Por «tierras de leche y miel» con Gonzalo Recio

Flamante ganador del Premio al Mejor Documental en la Seminci de Valladolid, hablamos con el cineasta toledano

El abuelo de Dani, Gio y Vika, que fue leñador en Abjasia, les habla de los árboles que crecen en un parque de Tblisi
María José Muñoz

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Un retrato colectivo del desplazamiento y las cicatrices de la guerra , centrado en las consecuencias de los conflictos en la antigua Yugoslavia, Abjasia, y la reciente situación de los refugiados sirios en Grecia, es la película de 88 minutos de duración que se ha alzado con el Premio al Mejor Documental en DOC_España de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci ). Detrás de esta historia que se adentra en unos personajes que día a día se enfrentan al desarraigo, sin certeza clara de qué les deparará el futuro, está el toledano Gonzalo Recio, director del documental junto a sus compañeros Héctor Domínguez-Viguera y Carlos Mora Fuentes, con los que creó Zerkalo Films en 2013. La ópera prima de esta productora independiente, el documental «Tierra de leche y miel» , ha obtenido ahora el citado galardón en la Seminci después de otros conseguidos anteriormente, como el Greek Film Centre Award.

El documental premiado nos acerca, en Sarajevo, a las vidas de Mirsada y su hija Vanesa , que sobreviven, después de 25 años, en el centro colectivo de Hrasnica, esperando una solución, una vivienda, que nunca llega. En Georgia, Bela, de 78 años , lucha cada día por recuperar los cuerpos de los desaparecidos en las guerras de Abjasia, mientras que cientos de desplazados provocados por el conflicto comienzan a adquirir en Tblisi las prometidas viviendas gubernamentales. Sin embargo, a Dani, Gio y Vika , de 11 años, les cuesta asumir que un día tendrán que separarse y abandonar el barrio en el que han crecido. También, en Grecia, Alia y Hussein , que huyeron de la guerra en Siria, esperan con anhelo la reunificación familiar y el reencuentro con su hija Zozan desde Polykastro, un limbo del que no es fácil salir.

Antes de sacar la cámara, Gonzalo Recio y sus compañeros compartieron largas jornadas con los protagonistas para generar una confianza que culminó con una hospitalidad «asombrosa» de todos ellos hacia los cineastas. «La mayoría reaccionaron muy bien porque estaban deseosos de contar su historia ; otra cosa es el hecho de sacar la cámara y que entendiesen el tipo de documental que queríamos hacer, que iba más allá de la simple pregunta y respuesta, por lo que previamente hubo un proceso de confraternización, de asentamiento de una pequeña amistad para que no se sintieran invadidos y hubiera cierta confianza y comodidad para que no vieran la cámara como un enemigo ; que pudiesen actuar sin importarles que nosotros estuviéramos allí. Con los niños fue mucho más fácil porque rápidamente se lo toman como un juego y pierden la vergüenza a la cámara», explica Recio, que para la realización del domental permaneció seis meses en los países de los protagonistas, lógicamente antes de que se declarara la pandemia mundial por el Covid-19.

Los primos Dani, Gio y Vika conversan con la ciudad al fondo

La financiación de la película ha corrido a cargo de Zerkalo Films y los tres directores, que consiguieron ayudas del Ayuntamiento de Madrid, de la Consejería de Juventud de Cantabria y de un festival de Galicia. ¿ Y Castilla-La Mancha? «Nada, lo pedimos, tocamos alguna puerta, pero no conseguimos nada» , señala el director.

Actualmente, Gonzalo Recio trabaja también como atrezzista en una serie para Netflix que lleva por título «Sky rojo» , de los mismos productores de la exitosa «La casa de papel» y que se emitirá en los primeros meses de 2021.

Gonzalo Recio

Nacido en Toledo en 1985 , estudió dirección de cine y televisión y comenzó a trabajar en la TV nacional como operador de cámara y realizador. En Zerkalo Films, su productora, trabaja como director de fotografía y editor. En 2016 realizó el cortometraje documental «Still Wind» (viento detenido en castellano), un acercamiento introspectivo y sensorial a los campos de refugiados diseminados por toda Grecia por el que recibió un premio en la tercera edición del Certamen de Cortometrajes de Castilla-La Mancha, celebrado el pasado año.

El documental tiene una duración de 88 minutos

«El cine me ha gustado siempre, pero empecé a planteármelo como una opción profesional a los 20 o 21 años , cuando me fui a Madrid a estudiar en una escuela de cine, donde conocí a mis compañeros. En 2008 comencé a trabajar en varios departamentos, en varias productoras, hasta que decidimos fundar Zerkalo Films para encauzar un poco los proyectos personales», explica este toledano que vive en la calle Taller del Moro, en el Casco Histórico de Toledo, y que estudió de niño en el colegio Divina Pastora (Terciarias) para luego pasar al IES «Universidad Laboral» ya de adolescente. Antes de entrar en el mundo audiovisual, empezó estudios de Filología Clásica.

Los visibles estragos de la guerra aún perviven en Tiflis, la capital de Georgia

El premio de la Seminci sin duda impulsará «Tierra de leche y miel» a nivel comercial y de distribuición. Y quizá, al verlo, volvamos a acordarnos de los desplazados y los refugiados . «Estos problemas parece que ya no existen, los medios de comunicación están centrados en otras cosas», dice.

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