Se derrumba parte de una ermita del siglo XVII en Guadalajara que el Estado expropió a la Iglesia

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Mercedes Vega

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Hispania Nostra ya advirtió en octubre de 2021 que el pequeño templo, catalogado como Bien de Interés Cultural de la provincia de Guadalajara, presentaba «un estado ruinoso con una amenaza inminente de derrumbe. En la actualidad, la piedra arenisca de la columna central y la parte superior del portón izquierdo (ya inexistente) está muy deteriorada, amenazando con un inminente hundimiento». Ese hundimiento es el que se ha producido en fechas recientes.

La Confederación Hidrográfica del Tajo expropió la ermita al obispado de Sigüenza-Guadalajara en 1995, y desde ese momento su declive se aceleró. En el año 1992 ya habían robado la imagen de la Virgen y en 1995, el Cristo Yacente, llevándose las puertas años antes.

Numerosas asociaciones y vecinos han reclamado a la Confederación Hidrográfica del Tajo que pusiera remedio al previsible colapso, pero no obtuvieron ningún éxito.

Hispania Nostra lamenta este hecho luctuoso, solicita que se tomen las medidas oportunas y pide que este suceso sirva para concienciar a toda la sociedad del inmenso acervo patrimonial que atesora España. «Es nuestro deber velar por él, mantenerlo y protegerlo para legarlo a las generaciones futuras», concluyen.