El Banco Santander cerrará este viernes siete oficinas en Castilla-La Mancha dentro del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que está acometiendo la entidad tras la integración de Banco Popular y que contempla la clausura de 1.150 sucursales en España .
De este modo, este viernes cierran 200 oficinas en toda España. De ellas, 46 están en Andalucía, 30 en Madrid, 27 entre la Comunidad Valenciana y Murcia, 21 en Cataluña, 20 en Galicia, 15 entre Aragón, Navarra y La Rioja, 10 en Baleares, 7 en Castilla y León, 7 en Castilla-La Mancha, 6 entre Cantabria y Asturias, otras 6 en Extremadura y 5 en Canarias.
Pese a los 1.150 cierres, el Santander asegura que ningún municipio se quedará sin servicios bancarios, ya que la mayoría de las clausuras se están produciendo en las ciudades y, además, la red de agentes y colaboradores se está reforzando.
Cada oficina que se cierra tiene otra sucursal del grupo a una distancia media de unos 230 metros. El banco explica que es necesario mejorar la eficiencia debido a la duplicidad derivada de la integración de Banco Popular.
El Banco Santander y los sindicatos firmaron en junio un ERE que, aparte del cierre de las 1.150 oficinas, prevé reducir en 3.223 los puestos de trabajo.
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