El PSOE de La Laguna, bajo sospecha por el contrato que sustituyó luminarias led ya cambiadas

Todo comenzó con el contrato de 900.000 euros en 2023 para cambiar luminarias en La Laguna, que se realizó por trámite urgente y sin publicidad. La adjudicación del mantenimiento del alumbrado público son 18,5 millones de euros, y solo se invitó a tres empresas, dos de ellas del mismo grupo. El expediente se ha ido retorciendo, ya que la tercera empresa invitada, que incumplía el pliego, se asoció poco después en una UTE que resultó adjudicataria del citado contrato de 18,5 millones, este sí por concurso público.

De las 1.144 luminarias que había que cambiar, la mitad ya habían sido sustituidas por la empresa que desde 2018 se venía encargando del mantenimiento y la conservación del alumbrado público municipal, dentro del plan de sustitución de luminarias desfasadas por otras de tecnología led. El Ayuntamiento, a través de la concejalía de Servicios Públicos, licitó la adjudicación con fondos DUSI sin haber comprobado si en las calles y espacios públicos que abarcaba este proyecto ya estaban instaladas luminarias led.

Una de las empresas del sector, que no fue invitada a participar del procedimiento, ha llevado el litigio al Tribunal Superior de Justicia (TSJC) de Canarias, donde está aún sin resolver. En el caso del contrato de mantenimiento del alumbrado público, con la jugosa cantidad de 18,5 millones de euros, las casualidades se multiplican.

El Ayuntamiento contrató el asesoramiento del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Santa Cruz de Tenerife (COIITF) para que valorara las ofertas presentadas a esta millonaria licitación, con una importante decisión para la entidad, cuya secretaria es la mujer del delegado de Imesapi, la empresa principal en la UTE que ha resultado adjudicataria del alumbrado. Además, como funcionaria del Ayuntamiento, era la jefa de este servicio durante los preparativos del encargo de dicho asesoramiento, y aunque se apartó posteriormente, se responsabilizó de los trámites y la valoración un nuevo jefe de servicio, que es el hijo del decano del COIITF.

Esta cuestión del procedimiento de licitación, no fue conocido por las empresas concursantes, que desconocían la existencia del encargo al COIITF y, por tanto, tampoco las identidades de los técnicos del Colegio que iban a valorar sus ofertas.

De acuerdo a la información publicada por el Canarias7, el Ayuntamiento defiende el proceso y señala en relación al asesoramiento del Colegio Oficial de Ingenieros, que «en ningún momento ha existido conflicto de intereses con empleados de esta administración local».