Giro en el caso Yéremi Vargas: el informe forense contradice la hipótesis de la familia
La hipótesis que respalda la familia del menor, desaparecido en 2007, está sustentada en las palabras que Antonio Ojeda compartió con un compañero de celda
Caso Yeremi Vargas: claves y preguntas que quedan por responder
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Iniciar sesiónLa desaparición de Yéremi Vargas esconde uno de los casos más trágicos y complicados de los últimos años. Fue en el año 2007 cuando este niño de siete años se esfumó sin dejar rastro mientras jugaba en un descampado junto a su casa ... en Vecindario, Gran Canaria. Aún a día de hoy, cuando se cumplen 17 años desde la última vez que se vio con vida al pequeño, son muchas las incógnitas que quedan por resolver.
La investigación del caso sigue abierta, aunque son pocas las novedades que llegan. Sin embargo, un reciente informe del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Las Palmas (IMLCF) ha dado un auténtico giro a estas indagaciones, desmontando así una de las principales hipótesis que sustenta la familia del niño desaparecido, la implicación de Antonio Ojeda, 'el Rubio', en el caso.
Según desvelan estas nuevas informaciones, no existen «anotaciones en los informes médicos sobre la existencia de signos de cianosis». «Desde el punto de vista médico no consta que el menor fuera separado del programa de control de niño sano, por patología alguna», reza el comunicado de los forenses, que podría desmentir que el menor sufriese esta enfermedad crónica, relacionada con la corriente sanguínea.
La hipótesis del «niño azul», la principal línea de investigación en el caso de Yéremi Vargas
La hipótesis que respalda la familia de Yéremi Vargas está sustentada en las supuestas palabras que Ojeda compartió en prisión con un compañero de celda, en las que se refería a Vargas como el «niño azul». Unas declaraciones muy relevantes para las pesquisas, pues los allegados del pequeño defendieron que solo un círculo cercano conocía la enfermedad del niño, que provoca que la piel se vea de una tonalidad azulada debido a la falta de oxígeno en sangre.
Este comentario por parte de Antonio Ojeda llevó al Juzgado de Instrucción Nº2 de San Bartolomé de Tirajana a reabrir el caso en 2021. Aunque esta es la principal línea de investigación que maneja la familia 17 años después de la tragedia, por el momento no se ha encontrado una explicación definitiva a esta desaparición.
Esta nueva información que desmonta la hipótesis del «niño azul» llega después de que el abogado de la acusación particular, Carlos García Montes, solicitara este informe al IMLCF para corroborar las palabras de sus clientes y probar la culpabilidad de Antonio Ojeda en el caso. Sin embargo, la falta de pruebas en torno a la existencia o no de cianosis vuelve a dejar el caso en un punto desconocido.
No se han encontrado signos de que Yéremi padeciera cianosis
Estos informes forenses, que cubren los documentos médicos comprendidos entre el nacimiento del pequeño hasta meses antes de su desaparición, no encontraron «patologías de interés reseñables» en su historial. Según las dos forenses encargadas de la investigación, el único antecedente destacado de sus visitas a Urgencias era un broncoespasmo: «No presentaba patología crónica que le hiciera llevar un tratamiento específico o revisiones periódicas. De existir otros informes médicos donde haya información a valorar, y que estas peritos no han tenido en cuenta, rogamos sean aportados por el letrado para su estudio».
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