Sin rastro de Tomás Gimeno y las niñas desaparecidas en Tenerife en el sexto día de búsqueda

Por tierra, los agentes del cuerpo nacional han regresado a la finca del padre de las menores, Tomás Antonio Gimeno en busca de algún rastro que pueda arrojar luz sobre el paradero de los tres, desaparecidos desde el pasado martes en Tenerife.

Las labores de rastreo se han ampliado hacia el oeste de la isla y también a zonas más alejadas de la costa, además del área frente al Puertito de Güímar, donde fue hallada, vacía y a la deriva, la embarcación de Tomás Antonio Gimeno. La investigación mantiene varias líneas abiertas y no se descarta ninguna hipótesis.

La búsqueda de Tomás Antonio Gimeno y sus dos hijas, Anna y Olivia, se activó tras la denuncia de la madre de las pequeñas, Beatriz Z. que se puso en contacto con el padre de las niñas, su expareja, porque no se las entregó a la hora acordada . Tomás Antonio Gimeno había recogido a su hija Anna en el domicilio de la denunciante para pasar la tarde con ella, y posteriormente recogió a la mayor, Olivia, del centro en donde estudia.

Entre la denunciante y Tomás Antonio Gimeno no existe convenio regulador ni sentencia judicial para las visitas de las menores, por lo que estas se realizan de mutuo acuerdo entre ambos, tal y como versa el auto de la denuncia. Sobre las 21 horas, la madre de las pequeñas se trasladó al domicilio para recoger a sus hijas, pero en el lugar no estaban las niñas ni él .

El padre de las pequeñas indicó a la madre, vía telefónica. que no se encontraba en el lugar porque había salido a cenar con las niñas , y acordó en llevarlas al domicilio de la madre en Radazul cuando acabasen de cenar.

Al demorarse en la hora acordada, la madre de las menores vuelve a llamarle y este la amenaza, asegurándole que n o iba a volver a ver a las niñas ni a él jamás , que no se preocupara que se iba a encargar bien de las niñas, y que no iba a volver a saber nada más de ellos.

A las 22.30 y 22.40 horas, la madre vuelve a contactar con el padre de las menores, en los mismos términos que la llamada anterior. En torno a las 23:45 horas el teléfono de Tomás Antonio Gimeno aparece como apagado o fuera de cobertura. La siguiente llamada telefónica entre ambos es a las 01.30 horas y en ella hablan también de su relación , aunque Tomás Antonio mantiene su amenaza de desaparecer junto con las niñas de la vida de Beatriz Z.

A partir de las 6 de la mañana, el teléfono de Tomás Antonio Gimeno aparece apagado nuevamente y la madre de las menores acude al Acuartelamiento de la Guardia Civil, primero de Radazul y posteriormente de Candelaria.

La madre de Anna y Olivia asegura que los padres de Tomás Antonio Gimeno le vieron en compañía de las pequeñas la tarde anterior y que este, al marcharse, había empleado un tono que los padres interpretan como de despedida , aunque no detalla a donde se dirige.

Según Beatriz Z, amigos y personas cercanas al padre de las menores le manifestaron que no sabían nada de él y que habían recibido un mensaje en tono de despedida .

Las cámaras de seguridad de la Marina y un vigilante vieron a Tomás Antonio Gimeno embarcar solo en un yate de su propiedad pasada la media noche, tras cargar bolsas de lona y otros enseres en el barco.

La embarcación fue hallada vacía y a la deriva horas después, com rastros de sangre que están siendo aún analizados. En la embarcación falta el ancla .

Horas después fue encontrada en la zona una sillita de retención infantil (maxicosi) flotando en el mar , que la madre de las niñas ha reconocido.

El juzgado de primera instancia e instrucción número 3 de Güímar ha dictado una orden de búsqueda internacional del padre y las niñas y las diligencias han sido declaradas secretas , ante la presunta comisión de un delito de secuestro.