El PSOE andaluz bendice el acuerdo para la financiación a la carta de Cataluña y lo considera «ejemplo de diálogo»

La vicesecretaria general del PSOE-A, María Márquez, bendijo el trato y descartó que vaya a haber comunidades autónomas que se puedan considerar «agraviadas». La socialista valoró la reunión entre ambas administraciones y la consideró «un ejemplo más del diálogo y de la mano tendida que tiene el Gobierno de España con todos los territorios».

Márquez se remitió a las palabras de su secretaria general, María Jesús Montero, en el mitin que protagonizó el sábado en Jerez donde dijo que, «mientras que haya un socialista al frente del Gobierno de España, no va a haber ningún territorio agraviado ni ningún ciudadano agraviado por el código postal».

La reforzó el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, quien consideró que «se está haciendo lo que podía estar haciendo Andalucía perfectamente, que es profundizar en el desarrollo de su Estatuto de autonomía», al tiempo que trasladó la «garantía absoluta, por parte del Gobierno de España de que el principio de solidaridad, que es la base fundamental que constitucionalmente viene establecida para la financiación autonómica, nunca se va a vulnerar».

También le «suena bien» a Enrique Santiago, portavoz de Sumar en el Congreso y diputado por Córdoba, siempre y cuando «no se generen nuevas desigualdades entre territorios». Este diputado de IU anuncia que «apoyarán el resultado de ese pacto en la medida en que sea un plan que pueda ser generalizable para el resto de los territorios del Estado, que atienda a corregir las desigualdades, pero que no genere nuevas desigualdades respecto a otros territorios».

La única voz discordante en la izquierda fue la del responsable de organización de Adelante Andalucía que habló muy claro: «no vamos a apoyar ningún acuerdo que no dé a Andalucía lo que es nuestro». «Somos el pueblo más grande del Estado» y estamos infrafinanciados». Salvador defendió estos argumentos en declaraciones a los medios, y se mostró firme en proclamar que «no vamos a defender ningún acuerdo que no respete Andalucía».

Especialmente duro con la reunión fue el secretario general del PP andaluz, Antonio Repullo, quien consideró que privilegiar a Cataluña supone «romper la igualdad y la solidaridad para establecer una España a dos velocidades» y supone «un robo a Andalucía». En una rueda de prensa manifestó que la «negociación bilateral entre el Gobierno y el independentismo para el reparto insolidario de los recursos públicos es un agravio para el resto de las comunidades autónomas y un robo para Andalucía», una tierra que lleva años exigiendo «una financiación justa y que se levanta hoy con este saqueo a sus impuestos y a sus esperanzas».

Según dijo, «cuánto más débil está el Gobierno, más pueden chantajearlo sus socios». «La debilidad política de Pedro Sánchez por la corrupción del PSOE nos pasa factura a todos los españoles, porque los independentistas se aprovechan de esa debilidad para seguir empobreciendo a España».

Por su parte, el portavoz del grupo parlamentario de Vox en Andalucía, Manuel Gavira, manifestó que el acuerdo entre el Gobierno central y la Generalitat catalana sobre la financiación singular de Cataluña supone una «nueva traición» de Pedro Sánchez a la nación. En declaraciones a los medios en Marbella dijo que «el Gobierno está vendiendo nuestra soberanía, está humillando a nuestra nación y está legitimando el golpismo».

Por eso es tan importante, a su juicio, que el PP entienda «que hay que hacer una posición frontal y diaria al Gobierno de Sánchez» como está haciendo Vox. «Si no es así, lo que parecerá es que quiere heredar lo que dejen los socialistas y cada vez nos va a quedar menos», concluyó.