Al borde de la muerte en Tolox tras cortarse en un testículo porque creía que debía entrar en prisión

El agente al que pidieron socorro acudió a la llamada de auxilio , que se produjo a finales de mayo en pleno confinamiento. Le alertaban porque un hombre se había provocado una grave herida a la altura de los testículos y sangraba abundantemente. Rápidamente el agente, en compañía de un policía local, acudió a la vivienda donde se encontraba el herido.

Allí halló a un hombre en ropa interior, tumbado en el suelo sobre un gran charco de sangre, convulsionando y sin apenas consciencia . Su pareja en estado de «shock», muy nerviosa, sin reaccionar lo acompañaba. El agente cogió un paño limpio de la cocina y le taponó la herida, mientras la mujer le decía que se le había hecho con un cúter.

No fue sencillo. La herida estaba entre los testículos y la pierna, sin posibilidad alguna de hacer un torniquete efectivo por el punto concreto anatómico donde se hallaba el corte. Pero consiguió taponar con éxito, mientras llegaban los servicios sanitarios.

El agente consiguió contactar con la Central Operativa de Servicios para dar cuenta de la gravedad de las lesiones y de que se reiterara la llamada a los servicios sanitarios. Alertaba de que la persona estaba en estado muy grave y temía por su vida si se demoraban de masiado, ya que «la hemorragia era masiva» .

De esta forma, el agente de la Guardia Civil, salvó la vida al herido hasta la llegada de los servicios médicos del Centro de Salud, que se hicieron cargo de la situación, estabilizaron al herido y los trasladaron a un centro hospitalario. Una vez recuperado, la Guardia Civil de Tolox le tomó declaración al herido sobre lo sucedido y descubrió que casi muere por un error .

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que ha dado a conocer el caso, ha solicitado a la Jefatura de la Comandancia de Málaga que se impartan más jornadas formativas y al mayor número de miembros del Cuerpo en este tipo de situaciones, control de hemorragias, RCP básica a adultos, niños y lactantes, puesto que son numerosos los servicios sanitarios en los que intervienen en la calle, bien sea a requerimiento de los ciudadanos o por aviso de la central del 112 y del 061.