Educación digital para que mujeres gitanas sean competitivas en el mercado laboral

«Las nuevas formas de acceso al mercado laboral, a través de plataformas online, son un obstáculo para muchas personas que no dominan el terreno digital» y en concreto, para las mujeres gitanas, esto es «una barrera más» que complica su acceso a un puesto de trabajo. La baja cualificación y las dificultades para conciliar con la vida familiar se suman, creando su particular burbuja de exclusión, ha señalado Jiménez. De ahí que la Fundación haya enfocado el programa de la segunda edición de «Edyta» en el aprendizaje de herramientas propias del ámbito laboral digital .

«La experiencia del año pasado es muy positiva. Aprendieron a crear de forma básica una web, un blog, el trabajo con redes, pero les falta el conocimiento de herramientas que pongan en valor sus perfiles profesionales». Tras la formación anterior, cuenta Jiménez, unas cuatro mujeres encontraron un puesto de trabajo relacionado con el manejo de herramientas digitales.

Con estos cursos pueden por un lado « diversificar sus perfiles y no optar únicamente a puestos de limpieza, por ejemplo, sino que tienen habilidades para trabajar frente a un ordenador o con una tableta», señaló el coordinador de Secreatariado Gitano. Además de esto, «podrán aplicar estos conocimientos en su día a día, con sus familias y ganar independiencia en cuanto a buscar información o realizar una gestión online», comentó Jiménez.

Este curso se impartirá en un aula digital que ha sido dotada con herramientas y dispositivos por la Fundación Orange. En opinión de Jiménez, este espacio gana valor porque «otras personas pueden usarlo para acceder a internet. Concretamente en 2018 unas 200 personas usaron esta sala ante la falta de recursos en su entorno».

El programa se encuentra dentro de la línea de formación sociolaboral que ofrece la FSG en Córdoba y también forma parte de un proyecto de ámbito nacional de la Fundación Orange en torno a la educación y transformación digital, destinado, tanto a mujeres, como a asociaciones del tercer sector, que trabajan con colectivos femeninos en situación de vulnerabilidad, riesgo de exclusión y baja empleabilidad.