El Juzgado de lo Penal 5 de Córdoba ha condenado a M.T., propietaria de una explotación ganadera en Espiel a 15 meses de cárcel e inhabilitación tras constatarse el maltrato continuado de su ganado, que provocó la muerte de 23 vacas y un ... grave deterioro en el resto del rebaño compuesto por 74 reses.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso ABC, considera como hechos probados que con ocasión de una primera inspección realizada por agentes de la Guardia Civil el día 3 de julio de 2019 se detectaron en la explotación del Valle del Guadiato 25 cadáveres de reses en distinto estado de descomposición mientras que los animales vivos carecían de suficiente agua y comida así como de asistencia veterinaria.
En esta situación, expone el fallo, algunos de estos animales presentaban heridas sin curar y un estado de desnutrición severo, que ponía en peligro su vida e integridad física, realizándose una segunda inspección con asistencia veterinaria, que constató el estado de los animales. Ante esas circunstancias, se acordó su incautación y sacrificio de estos que ya no podían sobrevivir.
La sentencia recoge que en los informes de los agentes del Seprona de la Guardia Civil y veterinarios constataron que muchos animales se encontraban en «estado caquéctico e irrecuperable» y que los cadáveres aparecían en «distinto estado de descomposición», evidenciando que la negligencia se prolongó en el tiempo.
La acusada intentó justificar la situación argumentando en el juicio que los animales recibían alimento y que la mortandad podía deberse a furtivos o causas naturales, pero el tribunal consideró que «las explicaciones de la acusada resultan incompatibles con las pruebas documentales, fotográficas y periciales«.
Delito continuado de maltrato animal
La sentencia aplica además la figura del delito continuado, señalando que «las omisiones en la alimentación, hidratación y cuidados veterinarios se prolongaron en el tiempo y afectaron de forma homogénea al conjunto del ganado».
Por su parte, O. A., también acusado en esta causa, ha sido absuelto, al no acreditarse su participación ni responsabilidad en la gestión de la explotación.
El fallo recuerda la obligación legal de los titulares de explotaciones ganaderas de garantizar la alimentación, el agua y la asistencia veterinaria adecuada a sus animales, recordando que la omisión de estos cuidados constituye delito según el artículo 337 del Código Penal.
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