Las averías en la Alta Velocidad se acumulan con el horizonte de dos nuevos operadores en Córdoba

Esta situación de aumento de los problemas en la línea de alta velocidad más antigua del país se produce justo en el momento en el que está en el horizonte que dos nuevos operadores comiencen a circular. Son Iryo, que comenzará el 31 de marzo sus operaciones con Córdoba, y Avlo, la operadora de bajo coste de Renfe, que ha anunciado que empezará a viajar en esta ruta en junio.

Las incidencias, lamentablemente, coinciden también en el tiempo con el inicio de las obras para la renovación integral de los 470 kilómetros de línea que une Madrid con Sevilla. La inversión que está haciendo Adif para el cambio por completo de esta vía desde la capital de España hasta la de Andalucía tiene un coste de 650 millones. A ellos, hay que sumarle que Adif ha sacado esta misma semana a licitación un contrato para el mantenimiento de todo del corredor sur (Madrid-Sevilla, Córdoba-Málaga y Antequera-Granada) por valor de 140 millones para los próximos cuatro años. Eso supone que el administrador está invirtiendo 790 millones de euros para la renovación integral de la línea y su mantenimiento.

Sin embargo, el esfuerzo, de momento, no está impidiendo que las averías se acumulen en los últimos meses e incluso estén afectando directamente a los usuarios, a los viajeros. Un recorrido por los últimos incidentes que ha nafectado a esta línea o sus trenes (sólo más importantes) y, por tanto, a miles de viajeros con destino o salida de Córdoba dejan un balance de hasta siete averías de cierto calado en los últimos cuatro meses.

La última se produjo este miércoles a las 15.40 horas. Una incidencia en la catenaria en el tramo entre Los Yébenes y Ordaz, en Toledo, ha provocado que la circulación en la vía 1 de la línea Madrid-Andalucía esté sin circulación. Por eso, los trenes viajan por una sola vía entre Ordaz y Urda, también en Toledo, en un tramo de 30 kilómetros. Esto ha motivado que, desde entonces, todos los trenes de la línea de alta velocidad entre la capital y el sur estén afectados.

Hay retrasos con un promedio de «30 minutos» en el 90 por ciento de los trenes, aunque, en pocos casos, es superior, menor o no existe, según explican desde Renfe. Adif añadió este jueves a ABC que la reparación no se pudo finalizar en la madrugada del jueves, por lo que se habrá continuado durante esta madrugada del viernes, con el objetivo de completarla si fuera posible.

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J. Gómez

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Es sólo la punta del iceberg. Las averías se han multiplicado en este corredor en los últimos meses. Cronológicamente, el 16 de febrero también hubo una incidencia notable con los trenes que unían Madrid y Granada en los dos sentidos. Ambos acumularon horas de retrasos, lo que permitió a sus viajeros se indemnizados por el compromiso de puntualidad (los que reclamaron; no se hace de oficio). La incidencia se produjo en Calatrava. Eso obligó a utilizar una sola vía, momento en el que comenzaron los retrasos.

La avería más grave se produjo el pasado 17 de enero, hace menos de dos meses. Entonces, otro problema en la catenaria provocada por el viento, según Adif en Ordaz y Mora (Toledo), dejó sin tensión a la línea. Durante algunas horas tuvo que interrumpirse el flujo de la circulación en los dos sentidos, aunque la mayor parte la comunicación se mantuvo por una sola vía. En este caso, los retrasos en los trenes fueron sustanciales, pero sobre todo se llegó a interrumpir incluso la venta de billetes por Renfe. Ocurrió en pleno movimiento por Fitur. Afectó a más de un centenar de trenes con destino, paso o llegada a Córdoba. Duró más de dos días.

Sólo unos días antes, justo al finalizar las vacaciones de Navidad (8 de enero), se produjo otro colapso. En este caso, la avería llegó por un tren que atropelló una chapa metálica en Torrejón de Velasco (Madrid). Un accidente que motivó una avería en el sistema de frenado. Como consecuencia, se produjeron retrasos en más de una decenas de viajes. Los retrasos acumulados fueron de más de dos horas. Afectó a unos dos mil pasajeros.

Los cuatro meses en los que las incidencias en la línea Madrid-Andalucía se han multiplicado comenzaron el 19 de octubre, cuando otra catenaria provocó otro problema de tensión en las vías. Como consecuencia, los pasajeros de dos trenes de alta velocidad tuvieron que ser transbordados. Además, quedaron afectados con retrasos otra docena de trenes.

Sin embargo, las incidencias no sólo han afectado a la línea directamente. En los vehículos de Renfe también se han producido incidencias de calado que han trastocado la rutina de los viajeros ferroviarios de Córdoba. Uno singular se produjo también el 7 de noviembre. Ese día, el Cercanías (Media Distancia oficialmente) que une Córdoba con el Campus Universitario de Rabanales se quedó completamente parado y sin luz en el túnel de salida de la estación cordobesa durante una hora. Los 600 pasajeros afectados se quejaron de falta de información.

Por si fuera poco, un vagón del tren que une Cádiz con Barcelona, a su paso por Alcolea (Córdoba), se incendió el pasado 31 de enero por un problema en el pantógrafo (une la catenaria con la cabeza tractora). Como consecuencia 120 viajeros tuvieron que ser desalojados del tren y trasladados por medios alternativos. Cinco personas fueron atendidas por los sanitarios y una fue trasladada al hospital.

Esta situación se produce, a pesar del esfuerzo inversor de Adif para renovar de forma integral la vía. En concreto, el administrador, según detalló este jueves a este periódico, ha puesto en carga ya 580 millones de los 650 de inversión prevista en contrataciones para la reforma de todas las infraestructuras de la línea Madrid-Andalucía.

En concreto, ya están adjudicadas y, en parte en ejecución, las obras del tramo Córdoba-Sevilla, con un coste de 27 millones de euros y un plazo de ejecución de 26 meses. También están adjudicadas la reforma del tramo Córdoba-Guadalmez (Ciudad Real) por un importe de 52 millones y un plazo de ejecución de 15 meses. Es decir, la renovación de toda la alta velocidad de este corredor en la provincia de Córdoba ya está en marcha.

Además, también se está ejecutando la modernización de 63 desvíos, entre el que se encuentra el de Villanueva de Córdoba-Ciudad Real. Igualmente, se está cambiando la señalización (por ERTMS), las instalaciones de telecomunicaciones y energía, así como la iluminación de los túneles.

A esos 650 millones previstos, Adif también sacó este lunes a licitación el contrato de mantenimiento de todo el corredor sur para cuatro años por otros 140 millones. En total, casi 800 millones de inversión para subsanar estos problemas.

La acumulación de incidencias se produce en un momento en el que la capacidad de la línea se pondrá claramente a prueba. Hasta hora, sólo los trenes de Renfe han circulado por sus vías. El AVE ha sido la joya de la corona durante 30 años. Sin embargo, la actividad de la línea Madrid-Andalucía se multiplicará en los próximos tres meses. Para empezar, Iryo empieza a operar con Córdoba (Sevilla y Málaga) desde el 31 de marzo. Avlo, el 'low cost' de Renfe, se compromete a hacerlo antes de junio. En el horizonte de este año también se sumará Ouigo.