Un solo alcalde, predestinado a doblar el pulso a Zapatero
Las miradas del PP convergen en Alovera y en un escaño clave, incluso para las generales
Alovera es un municipio de Guadalajara con un padrón de unos 12.000 habitantes situado en el Corredor del Henares, muy cerca de la Comunidad de Madrid, con un potente sector industrial dedicado a la logística y con una de las factorías cerveceras más importantes ... de Europa, Mahou. La crisis económica y el paro también han hecho mella en Alovera, donde gobierna desde 2007 el Partido Popular, con David Atienza a la cabeza. El alcalde, además, se presenta a las elecciones autonómicas de Castilla-La Mancha en la candidatura del PP por Guadalajara, como número 5. Y en él se han posado todas las miradas, esperanzas y anhelos de su partido. Es muy sencillo: si Atienza sale elegido diputado regional, se da por hecho que el PP ganará las elecciones en Castilla-La Mancha por primera vez en la historia, lo que será un éxito no sólo para María Dolores de Cospedal, sino también para Mariano Rajoy, quien a su vez vería allanado el camino para llegar a La Moncloa en marzo de 2012.
David Atienza se lo toma con calma. Él solito puede doblar el pulso a José Luis Rodríguez Zapatero y a todo el PSOE. ¿Una nueva versión del David contra Goliat? «En realidad Goliat ya no lo es tanto, ha menguado bastante. Espero que tras el 22 de mayo se quede en un pitufo rojo, y por el bien de Castilla-La Mancha y de España decida un adelanto de las elecciones generales», comenta.
«Olvidados por el PSOE»
Atienza (43 años) es director de arte y trabajaba en una agencia de publicidad. En el año 2000 sufrió un accidente que le causó una discapacidad y le obligó a moverse en silla de ruedas. A raíz de ese hecho creó una asociación de ciudadanos en su barrio, donde los vecinos «se sentían olvidados por el PSOE». La Agrupación de Ciudadanos Independientes de Alovera (ACIA) fue un éxito y el PP se fijó en ellos. En 2006 recibió una llamada del partido de Rajoy para invitarle a presentarse como candidato del PP en las municipales de 2007. Así lo hizo, ganó las elecciones y desde entonces es alcalde de su pueblo. De momento no piensa en la política nacional: «No soy una persona ambiciosa en ese sentido, me he encontrado con todo esto sin haberlo buscado».
Guadalajara elige ocho diputados autonómicos, uno más tras la reforma de la ley electoral que impuso José María Barreda a mitad de la legislatura y que fijaba un número par de escaños en la circunscripción, lo que en teoría podía perjudicar al PP, que solía ganar por 4-3. Si los populares obtienen este domingo una ventaja de unos 10 puntos porcentuales sobre el PSOE, lograrán que el reparto ahora sea de 5-3, definitivo para la victoria en una complicadísima región. «Guadalajara es la gran olvidada del PSOE en estos últimos 30 años. No se han acordado nunca de nosotros, y hemos tenido una relación más cercana con Madrid», señala Atienza, quien quiere para su pueblo y su región sobre todo «más empleo»: «Hay que crear suelo industrial barato».
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