Rubalcaba quiere que el Congreso sea el revulsivo de Griñán

Ante la convocatoria electoral de las autonómicas andaluzas del 25-M, Rubalcaba pidió ayer a los andaluces (socialistas, se entiende) «un esfuerzo más para impedir que la derecha entre en Andalucía, y todo sea de la derecha».

En un acto público con militantes y simpatizantes socialistas en Almería, el otrora candidato presidencial admitió que «España le debe mucho a Andalucía» porque el estado de bienestar se ha construido «en parte» por al apoyo mayoritario de los andaluces al PSOE, algo por lo que «los socialistas tienen mucho que agradecer». Finalizó: «Al socialismo español le hace falta un triunfo en Andalucía».

Por ello, subrayó que el 38 Congreso Federal que el PSOE celebra del 3 al 5 de febrero en Sevilla tiene que estar enfocado a «reforzar» al candidato socialista, José Antonio Griñán más allá de servir de regeneración en el liderazgo socialista. De Griñán, acosado en las últimas semanas por el escándalo de los ERE, dijo que ofrece un «liderazgo solvente» frente al «inconsistente» de Javier Arenas.

Por su parte, Chacón trasladaba a los militantes de Las Palmas de Gran Canaria su propuesta de liderazgo recibiendo una buena noticia: los partidarios de su candidatura en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife se impusieron, con el 55 por ciento de los votos, en la asamblea local en el proceso de designación de delegados ante el congreso federal de febrero. La victoria de esta lista se suma a la obtenida por los partidarios de Chacón en la asamblea de Las Palmas de Gran Canaria, encabezada por el eurodiputado y anterior secretario general del PSOE canario, Juan Fernando López Aguilar.

Chacón también siguió la misma estrategia de Rubalcaba en sus críticas al PP, antes que hacer algún atisbo nuevo de autocrítica sobre la gestión de los siete años de zapaterismo: «En el PP no son competentes, no son valientes, pero rápidos sí que son con el hachazo fiscal que han llevado a cabo desde el Gobierno. Al PP se le ha caído la careta de cuajo», argumentó para arrancar los aplausos de la audiencia entregada.