Sánchez insiste a Iglesias que apoye su investidura pese a la «pataleta» de Podemos ayer

Cuando todavía no se han apagado los ecos de las imágenes de Carolina Bescansa con su bebé, y los acatamientos sui generis de los 69 diputados de la formación Morada, Sánchez ha querido transmitir un mensaje de que lo ocurrido no cambia nada el escenario: Mariano Rajoy no va a poder formar gobierno y el PSOE tiene la obligación de intentarlo; por más que desde ayer, este planteamiento suscite muchas más dudas entre los barones y los diputados socialistas, que ven con espanto a su potencial socio.

«Yo le preguntaría a Pablo Iglesias: ¿Qué concepto de la democracia tiene?» , ha dicho el líder de los socialistas a los periodistas tras registrar en el Congreso las 17 primeras iniciativas legislativas del Grupo Socialista en esta legislatura.

Democracia, respondió, «no es imponer», e Iglesias se está comportando «como un niño que, o haces lo que él quiere, o amenaza con dejar de respirar» , insistió Sánchez en alusión a la escenificación de su alejamiento del PSOE; un partido del que el lider de Podemos no se fía por su acuerdo en la Mesa con PP y C´s.

«Espero que pongamos los intereses generales de muchos españoles que han votado izquierda por encima de los de Pablo Iglesias», comentó Sánchez. Hoy ha empezado el tiempo del señor Rajoy y, si fracasa, empezará el suyo para «intentar liderar» un gobierno como el de Antonio Costa en Portugal. «Pablo Iglesias debe saber que democracia es diálogo y yo le tiendo la mano para que lleguemos a un gobierno a la portuguesa» , recalcó.

Por otro lado, Pedro Sánchez anunció que va a reunirse en breve con el nuevo presidente de la Genralitat, Carles Puigdemont . Explicó que no va a realizarle ninguna «oferta» concreta -Ferraz apoya al Gobierno en cualquier medida frente al desafío soberanista-, pero sí cree que su obligación política en este momento es «abrir la inter locución».

El líder socialista ha presentado este mediodía las 17 primeras proposiciones de ley y no de ley que quiere que el Congreso, aún con el Gobierno en funciones, empiece a tramitar ya. En su `competencia´ por la agenda social con Podemos y su «Ley de Emergencia social», el PSOE no se queda a la zaga.

Los socialistas quieren que el gobierno que forme Sánchez derogue en primer lugar la reforma laboral , que suba los 655 euros de salario mínimo interprofesional (SMI) -los sindicatos piden el 10% frente al 1% del Gobierno del PP- y que establezca ya el ingreso mínimo vital, una renta no contributiva, para los 720.000 hogares españoles sin recursos.

El resto de las proposiciones de ley y no de ley son: derogación de la LOMCE, impulsar un Pacto contra la violencia de género, recuperar el sistema universal de salud, reconstruir el Pacto de Toledo para asegurar el sistema público de pensiones, volver al marco legal de la RTVE de los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero para recuperar la «pluralidad» informativa, impulsar la reforma fiscal, ratificar el Pacto por la Ciencia, pendiente desde la legislatura pasada, revertir los últimos cambios del PP en la Ley de Enjuiciamiento Criminal, prohibir los indultos a condenados por corrupción, proposición de Ley contra la pobreza energética, e impulsar la reforma del Reglamento del Congreso.