La independencia real no llega al 15%

En este caso los datos revelan el cinismo del vicepresidente. Desde que Sánchez es presidente, Junts ha votado el 66 por ciento de lo que ha sometido a votación el PSOE. En contra, el 14%, y el 20 por ciento restante han sido abstenciones. Esquerra, aliada oficial del Gobierno, ha votado un 9% en su contra, no tan lejos del 14% de Junts, con su pretendido irredentismo. Las abstenciones de los republicanos están en el 18%, sólo dos puntos por debajo del partido de Puigdemont. Es igualmente remarcable que Bildu, otra formación proclive a dar lecciones de pureza independentista e integridad patriótica, haya votado sólo un 7% de las veces en contra del Gobierno que según su pensamiento “ocupa” el País Vasco.

Junts y Bildu intentan hacer creer a sus votantes que encarnan el independentismo que no se rinde y que la independencia puede ser para mañana. Los datos reflejan una realidad bien distinta y un pragmatismo oportunista idéntico al de cualquier otro partido. En la Corporación Catalans de Medios Audiovisuales, Junts ha pactado con el PSC los nuevos consejeros del organismo y los también nuevos -aunque de momento provisionales- directores de TV3 y de Catalunya Ràdio. De cara a las elecciones municipales de 2023, la estrategia que están siguiendo los post convergentes es pactar con el PSC en todas las localidades en que puedan desbancar a Esquerra del poder.