Podemos redobla sus críticas al PSOE y crece la tensión en el Ejecutivo
Los socios de la coalición ven las elecciones en Madrid como un plebiscito que podría determinar un adelanto de las generales
La coalición de Gobierno afronta una nueva etapa y lo hace con numerosas cuentas pendientes a resolver en las próximas semanas. Y pese a que el adiós de Pablo Iglesias anticipa sin duda un antes y un después en la relación entre socios, ... la inminencia de las elecciones en la Comunidad de Madrid empieza a aumentar la tensión en el Ejecutivo. 2021 estaba destinado a ser el año «tranquilo», de transición en esta legislatura. Algo que ya ha saltado por los aires. Y que ha hecho que la eventualidad de un adelanto electoral por parte de Pedro Sánchez se considere con más fuerza. La partida del 4 de mayo será decisoria. Y todos la van a jugar como un plebiscito.
Ayer el todavía vicepresidente segundo cargó de forma contundente contra la propuesta para la Ley de Vivienda que el departamento de José Luis Ábalos trasladó el martes al equipo negociador de UP. Iglesias siempre ha intentado mantener un tono moderado cuando se le ha preguntado por los incumplimientos del Gobierno , siempre ha dicho que «confiaba» en que iba a salir adelante el acuerdo, a pesar de que fuera de cámaras UP lleva meses filtrando su malestar.
Pero ayer culpó directamente al PSOE de «faltar el respeto a los ciudadanos» por negarse a regular los precios del alquiler cuando es un compromiso. Su salida de La Moncloa y los aires de precampaña estimulan en el líder de Podemos un mensaje más de oposición que de socio de los socialistas.
«Cuando se firma un acuerdo de Gobierno, el acuerdo está para cumplirse, porque no cumplir un acuerdo que se firmó ante los ciudadanos, es faltar el respeto a los ciudadanos, y Unidas Podemos no va a consentir que se falte el respeto a los ciudadanos de este país», dijo Iglesias en la firma de un acuerdo del sistema para la atención a la dependencia. Con corte de un minuto para redes sociales incluido.
Es esta la actitud que mantendrá desde fuera del Ejecutivo cuando pase a ser solo secretario general de Podemos y logre su escaño en el Asamblea de Madrid. Ayer el partido abrió el proceso de primarias para confirmar que el vicepresidente segundo será el candidato de UP en las elecciones del 4-M. Los resultados se conocerán el 28 de marzo, aunque la dirección no duda de que Iglesias se impondrá a todos los rivales que surjan. Lo que aún se desconoce es quiénes le escoltarán en su candidatura.
Desde su entorno no quieren aclarar todavía si está dispuesto a formar parte de un Gobierno del PSOE si no sale el primero de las urnas e insisten en que «Pablo sale a ganar». Lo que es evidente es que el adelanto tendrá repercusión a nivel electoral y lo que ocurra afectará a la legislatura de la coalición.
«El escenario ha cambiado»
Oficialmente el discurso es de continuidad , pero la salida de Iglesias y unos resultados no favorecedores para UP en Madrid podrían motivar un adelanto electoral a nivel nacional. En Podemos no son ajenos a ello. Motivo que explica que Iglesias haya querido dejar todo atado señalando ya a Yolanda Díaz como candidata.
En la parte socialista del Gobierno, de momento, niegan que exista ninguna vocación de anticipar las elecciones porque, aducen, no parece en estos momentos que haya ninguna fórmula de gobierno alternativa a la actual. El objetivo es superar la campaña de vacunación y empezar a detectar señales positivas en la economía. Muchos socialistas no defienden este anticipo porque «no hay nada que ganar con ello».
Pero sí se reconoce que el escenario «ha cambiado» y que puede haber afectación a la coalición y a la legislatura. Cosa que de puertas para afuera se trata de minimizar. Al margen de esto, el vicepresidente tiene un mes para dejar su acta de diputado y abandonar La Moncloa. Pretende hacerlo antes de la campaña, que empieza el 18 de abril, para seguir presionando con el acuerdo de coalición y meter el dedo en las heridas si fuera necesario. «No nos votaron para hacer amigos» , le gusta decir a él.
Ione Belarra , la actual secretaria de Estado de Agenda 2030, será quien asuma el ministerio de Derechos Sociales y siga liderando la negociación para intervenir los precios del alquiler. Pero el matiz importante para el partido morado es que ahora también lo podrá hacer desde el Consejo de Ministros. Visibilidad.
No es baladí teniendo en cuenta que mientras el secretario general del partido presionará desde fuera, ella y Díaz, que asumirá la Vicepresidencia Tercera y será líder de UP en el Gobierno , mantendrán esa misma estrategia dentro. «La vivienda no es solo un bien de mercado, es un derecho y lo que se firma, se cumple», insistió Iglesias. Fuentes del equipo negociador de UP lo tildan de «incumpliendo flagrantemente» y lamentan que el PSOE «sucumba a las presiones de la patronal».
El plazo acordado para llevar el proyecto al Consejo de Ministros se superó en febrero. Por su parte, el PSOE sigue apostando por aplicar beneficios fiscales a los propietarios que hagan una rebaja en sus contratos de alquiler. Pero Podemos lo denosta. Es uno de los conflictos crónicos de la coalición junto a las diferencias con 'la ley del solo sí es sí' y 'la ley trans'. Los dos proyectos de Igualdad siguen paralizados. La primera, no fue aceptada por la Justicia después de ser criticada por ministros socialistas; la segunda, no logra consenso.
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