El Gobierno retrasa una semana la aprobación de los Presupuestos de 2018

El Ejecutivo tiene prácticamente garantizado el apoyo de Ciudadanos, que hoy anunciaba en boca de su presidente, Albert Rivera , haber alcanzado un principio de acuerdo con Hacienda para el proyecto de cuentas públicas. Pero Montoro prefiere apurar unas negociaciones que, según el PNV decía esta misma semana, estaban todavía arrancando.

Así lo ha confirmado el propio ministro de Hacienda a los medios de comunicación en conversación en el patio del Congreso de los Diputados. Lo hacía precisamente tras haber mantenido una reunión con Ana Oramas , la diputada de Coalición Canaria.

La previsión gubernamental en estos momentos es aprobar el proyecto en un consejo de ministros extraordinario la próxima semana, por lo que se aprobaría el 29 de septiembre y no el 22 como estaba previsto. Tendría que ser una vez el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy , finalice una agenda internacional que le mantendrá fuera de España hasta el miércoles.

Sobre la mesa del Gobierno figuran varios asuntos sin cerrar que lastran la aprobación de las cuentas. Uno de ellos es la negociación de subida salarial entre Hacienda y los sindicatos de los funcionarios. El Ministerio había convocado para esta tarde la Mesa General de la Función Pública que reunirá a la secretaria de Estado de Función Pública, Elena Collado, –y no a Montoro como estaba previsto– con centrales y administraciones territoriales. Como apuntan fuentes sindicales, la Mesa General de esta tarde se mantiene, aunque a diferencia de antes, no será definitiva. Habrá otra la semana que viene, previsiblemente, el jueves antes de la aprobación del proyecto de Presupuestos.

Sin embargo, las posiciones entre los agentes sociales y el Gobierno están lejanas al acuerdo. El Ministerio ofreció ayer una subida salarial máxima de un 7,95% hasta 2020 con variables incluidas ligadas al crecimiento del PIB y al cumplimiento del déficit en los próximos años . Una propuesta que no satisfizo a los sindicatos. CSIF amenaza con movilizaciones y con dificultar la tramitación de los Presupuestos de 2018 si no se mejora la oferta salarial.