Junts vuelve a jurar la Constitución con «lealtad al 1-O» y ERC lo hace «hasta la república catalana»

Deste modo, los parlamentarios de Junts han jurado la Constitución « con lealtad al mandato democrático del 1-O , por fidelidad al pueblo de Cataluña, por la libertad de los presos políticos y el retorno de los exiliados y por imperativo legal».

Lo han hecho, además, íntegramente en catalán cuando la única lengua válida en el hemiciclo es el castellano. Hasta la llegada de Batet a la Presidencia de la Cámara, todos sus antecesores instaban a los diputados que intentaban realizar su acatamiento íntegramente en lengua cooficial a que utilizaran el castellano. La actual presidenta del Congreso cambió el criterio en mayo al no poder impedimentos al uso íntegro de lengua cooficial y ha mantenido la misma política este martes.

Por su parte, los parlamentarios de ERC han acatado la Carta Magna «por la libertad de los presos políticos y hasta la constitución de la repúblicana catalana , por imperativo legal», incluyendo así una limitación temporal que entraría en contradicción con la exigencia de juramento sin reservas señalada por el Tribunal Constitutional en su jurisprudencia.

En la misma línea, los diputados de Bildu han prometido «por imperativo legal hasta la creación de la república vasca», mientras los dos parlamentarios de la CUP han utilizado la fórmula «por imperativo legal prometo, en lealtad primera y última a nuestro pueblo» y el BNG lo ha hecho por imperativo legal y para «defender Galiza».

La bancada del PNV ha acatado la Ley de Leyes «por imperativo legal», una fórmula ha sido considerada válida por el Tribunal Constitucional.

Algunos diputados electos de Podemos han prometido acatar la Constitución «por la democracia y los derechos sociales». Es la misma fórmula con la que juraron el cargo en mayo tras las elecciones del 28-A. Otros se han limitado a decir «Sí, prometo». El diputado de Unidas Podemos Rafael Mayoral ha prometido por «las clases trabajadoras» y el secretario primero de la Mesa, Gerado de Pisarello , de En Comú Podem, lo ha hecho por «las Trece Rosas», informa Gregoria Caro . Además, a diferencia de mayo, los dirigentes de Podemos, Pablo Iglesias e Irene Montero , también han decidido prometer el cargo bajo un «Sí, prometo».

Al terminar el proceso de juramento, el presidente del PP, Pablo Casado , ha pedido la palabra para advertir de que «medio centenar» de acatamientos no han sido jurídicamente válidos y que su grupo recurrirá en amparo ante el Tribunal Constitucional la condición de parlamentarios adquirida por los diputados que los han pronunciado. El PP ya recurrió ante el TC el pasado mes de mayo los acatamientos realizados por los diputados independentistas y el caso está pendiente de resolución

«Usted no debería haber dicho que todos han adquirido la condición plena de diputados», ha replicado a Batet, criticando que no se aumentaran los medios técnicos de los servicios taquigráficos de la Cámara para que éstos pudieran cotejar lo dicho por cada diputado. Para Casado los ciudadanos han vuelto a asistir a un nuevo «espectáculo» en la Cámara.

Tras el líder popular, ha solicitado la palabra el presidente de Vox, Santiago Abascal , que en línea similar ha instado a Batet «a cumplir y hacer cumplir el Reglamento» y se ha reservado el derecho de iniciar las acciones judiciales que considere pertinentes «por la posible comisión de una prevaricación administrativa». Esta acción podría ir no solo contra los citados diputados sino también contra la presidenta de la Cámara y todos los miembros de este órgano que apoyen la tesis de ésta.

A su juicio, los diputados de Junts, ERC, el PNV, Bildu y el BNG no han alcanzado la condición de parlamentarios «porque su fórmula de juramento no es válida según la sentencia del TC». Abascal ha recordado así la exigencia legal de que las expresiones que acompañen a los juramentos no vacíen de contenido a éstos.

«Han realizado un acto de conjura contra la Constitución» , ha denunciado, adelantando que su grupo pedirá a la Mesa «que estudie con detenimiento las fórmulas de acatamiento». «Desde Vox nos reservamos todas las acciones legal no solo contra los electos sino contra la presidencia de la Cámara por la posible comision de prevariacación administrativa», ha dicho.

La portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas , ha sido la tercera en solicitar la palabra para advertir, igualmente, con los juramentos prestados por los parlamentarios secesionistas no se ajustan a la fórmula «sin reservas» exigida por el TC.

Batet ha rechazado las quejas de todos ellos leyendo otros fragmentos escogidos de la jurisprudencia existente en la materia y defendiendo la necesidad de interpretar la ley de manera «integradora». «Reforzando los derechos fundamentales, lo que hacemos es reformar nuestra democracia», ha argumentado. Además, ha cerrado la discusión raferrándose a que el Reglamento del Congreso establece que deben acatarse las decisiones de la Presidencia y que «no cabe debate alguno al respecto».

Antes de que los diputados comenzaran a prometer su cargo, y viendo el espectáculo venir, la portavoz del Grupo Popular, Cayetana Álvarez de Toledo , ha pedido la palabra a la presidenta de la Cámara antes del inicio de los juramentos para exigir «pulcritud legal» en el proceso. Ha solicitado la lectura de la resolución que especifica cómo deben producirse los acatamientos, recordando que «no pueden acompañarse de cláusulas o expresiones que vacíen o condicionen su sentido propio». «No caben juramentos con reservas mentales y verbales», ha advertido la diputada popular, quien ha vuelto a pedir a Batet que garantice que la juras se realicen «de manera perfectamente escrupulosa».

Sin embargo, Batet avanzó su intención de realizar como el pasado mes de mayo, una aplicación flexible» de las normas para garantizar el derecho fundamental a la participación. La política catalana ha subrayado que esta decisión no supone una aplicación «arbitraria» sino «jurídica» de las normas.

Además, ha dicho ser «muy consciente de sus responsabilidades y obligaciones» y ha insistido en que ejerce la presidencia del Congreso «de acuerdo con la base normativa que le corresponde e incluso teniendo esta vez criterio adicional de la Junta Electoral Central».

La polémica por los juramentos de los nuevos diputados fue creciendo este martes en el Congreso según se acercaba el momento del acatamiento. La presidenta de la Cámara rechazó a última hora de la tarde del lunes la toma de medidas adicionales para garantizar sin dudas la validez de todos los acatamientos y evitar la repetición de las escenas vistas el pasado mayo, en la anterior constitución de las Cortes.

La socialista catalana se lo ha hecho saber por carta a la portavoz del Grupo Popular, Cayetana Álvarez de Toledo , que le había enviado previamente una misiva pidiéndole garantías adicionales de que la sesión transcurriría con normalidad. Por ejemplo, el envío de un escrito a los diputados electos recordándoles su obligación o la garantía del uso de los micrófonos individuales para evitar que puedan volver a realizar juramentos que no sean escuchados por el cuerpo de taquígrafos que elabora las actas.

Batet le ha replicado que la Presidencia de la Cámara es la única que debe juzgar si un acatamiento se ha realizado de forma conforme con el Reglamento y la Constitución, mantiene que la sesión constitutiva de mayo se ajustó a la legalidad y remacha subrayando que los diputados son informados por escrito de sus obligaciones durante el proceso de acreditación. Batet ha remahcado escudándose en su condición de presidenta saliente del Congreso, olvidando que también será la presidenta entrante de la Cámara.