¿Fue la actuación policial de París la correcta? Este es el análisis que hacen los expertos

Hubo errores de previsión –se da por descontado que en este tipo de eventos siempre habrá grupos de maleantes que intenten hacer su agosto–, y de ejecución, pues es evidente que los anillos de seguridad fallaron , lo que permitió a cientos de hinchas sin entrada , o con una falsificada, acercarse hasta las mismas puertas del recinto , colapsándolas.

Los expertos consultados por ABC, no obstante, se muestran muy cautos a la hora de hacer su análisis , «porque hay que estar sobre el terreno para saber exactamente qué sucedió y qué errores se cometieron».

Pero con todas las cautelas propias de no contar con una información completa, sí hacen algunos apuntes: « Los perímetros de seguridad –explican– son esenciales porque sirven para filtrar a los aficionados. Por supuesto, a los que no tienen entrada, o está falsificada, no se les debe permitir el paso a la zona al estadio. En este caso no se ha dado una explicación de cómo estos grupos más o menos numerosos han sorteado ese cordón y han podido llegar hasta las mismas puertas del recinto». Sin duda, es un fallo grave, porque a partir de ese momento la capacidad de reacción es menor.

Asimismo, se produjo una importante concentración de personas en determinadas puertas de acceso al campo, convertidas en cuellos de botella . A medida que se acercaba la hora del partido los aficionados que sí tenían su entrada se ponían más nerviosos, a lo que también contribuía la imagen de hinchas trepando por las verjas para acceder al estadio sin que los vigilantes de seguridad pudieran detenerlos.

Pero hay más. «Si este perímetro se hubiera mantenido hasta la total evacuación del público, los grupos de delincuentes no habrían podido actuar tan impunemente, porque no hubieran podido acceder a ellos. Además s e ha echado en falta la actuación de patrullas móviles policiales por las inmediaciones del estadio que realizaran una labor preventiva, con identificaciones incluidas. También era necesaria una mayor presencia policial en las calles por las que transitaron los aficionados hasta el lugar donde se encontraban estacionados sus autobuses».

Asimismo ha sido objeto de controversia el hecho de que la Policía francesa cargara en zonas donde además de los criminales estaban seguidores pacíficos de ambos clubes: «La decisión de cargar, o hacer amagos de cargar, solo se puede tomar sobre el terreno, con todos los datos. Pero como norma general s olo se debe hacer si tuviéramos a esos grupos muy definidos y aislados . Ahora bien, cuando estos individuos están mezclados con aficionados que nada tienen que ver, el riesgo de tomar una decisión como esa es muy grande , porque habría seguidores que se pueden ver muy afectados por la actuación policial».

« Saint-Denis es un distrito conflictivo , en el que se sabía que actúan bandas de inmigrantes de segunda y tercera generación , y probablemente eso no se tuvo en cuenta lo suficiente. Es esa gente la que ha provocado más problemas, porque para esos grupos las grandes concentraciones son una oportunidad para actuar de forma impune... Luego está el problema de los que viajan sin entrada. Es una cuestión política, pero de la misma forma que en determinadas ocasiones se suspende el espacio Schengen de libre circulación se debería prohibir a estas personas el desplazamiento, porque son un problema para la seguridad de primer nivel . No podemos olvidar que muchos de los que hacen eso no son precisamente ejemplares».