Moreno pesca entre la izquierda y convence a 60.000 electores que votaban en blanco o nulo

Desde 2008, el PSOE ha perdido el 60% de su electorado en Andalucía, un total de 1,3 millones de votos

Cinco gráficos y mapas para entender los resultados de las elecciones en Andalucía

Imagen de un colegio electoral en Córdoba Valerio Merino

Roberto Pérez

Desde 2008, en cuatro citas electorales autonómicas, el PSOE andaluz ha perdido al 60% de su electorado. Le quedan poco más de 800.000 de los 2,18 millones que le votaron hace catorce años. Le han dado la espalda 1,3 millones ... de andaluces que han preferido quedarse en casa o votar a la derecha antes que seguir confiando en el PSOE. Por eso, parte del actual éxito del PP andaluz -y del centro-derecha en sentido amplio- se ha producido gracias al trasvase de votantes que le ha llegado por la izquierda . Ese traspaso ha sido relevante, no solo por la cantidad sino, sobre todo, por lo que significa de romper las antaño blindadas murallas del electorado andaluz del PSOE.

El pasado domingo, ese trasvase de electores fue decisivo para consumar este histórico vuelco que ha convertido al PP en el partido dominante en Andalucía, capaz de movilizar y concentrar al voto de centro-derecha y, al mismo tiempo , convencer a una porción de los que votaban tradicionalmente al PSOE y -en menor medida- a otras opciones de izquierdas.

Los 831.634 votantes que ha ganado el PP en estos históricos comicios andaluces salen de pescar en múltiples caladeros electorales: se ha llevado en tromba los 540.501 votos que ha perdido Cs respecto a los anteriores comicios autonómicos de 2018; ha rentabilizado el aumento de la participación, los 10.647 andaluces más que han acudido a votar en esta ocasión; y ha conseguido presentarse como una marca política en la que han confiado la mayoría de los 60.000 que en 2018 acudieron a votar en blanco o nulo, movidos por el enfado.

Así, es relevante que el domingo hubo 39.742 menos votos nulos que en los comicios de hace casi cuatro años -la mitad-, y 20.074 votos en blanco menos que en aquella ocasión -una diferencia del 35%-. Y eso también ha sido rentabilizado masivamente por el PP.

Laminado hasta el Pacma

A todo eso se les añade los votantes que han dado la espalda al PSOE y que, en vez de quedarse en casa, han apostado por confiar en el PP, al que ven como el partido que mejor puede resolver sus problemas, los de Andalucía y los del conjunto de España.

El trasvase incluso ha alcanzado a las marcas de la izquierda del PSOE, ese electorado que en 2018 concentró la marca Adelante Andalucía de Teresa Rodríguez y que en esta ocasión se ha repartido en la escisión entre Adelante Andalucía y Por Andalucía. El domingo, entre estas dos marcas sumaron 136.291 votos menos de los que cosechó Adelante Andalucía en 2018 , así que el batacazo también ha sido considerable. E igualmente lo ha rentabilizado el centro-derecha, cuyo contundente avance ha laminado, incluso, otras opciones alternativas como el animalista Pacma: ha perdido 34.632 votantes, prácticamente la mitad de los que tuvo en las elecciones andaluzas de 2018.

Vox ha tenido 97.000 votos más que en las autonómicas de 2018, pero 376.000 menos que en las generales de 2019

El pragmatismo en el voto ha aupado al PP, convertido en la gran marca política en Andalucía tras haber desbancado de esa posición al PSOE. Los populares sabían, desde hace años, que, para ganar en Andalucía, no les bastaba la desmovilización del voto de izquierdas; necesitaban convencer también a una opción del votante descontento del centro-izquierda. Y esto, que durante décadas pareció imposible, es lo que la aritmética de las urnas demuestra que se ha producido en esta ocasión. Eso explica el vuelco electoral del que fue todopoderoso granero de votos socialistas , un viraje que ha estado precedido de un relevante cambio sociológico.

Los barómetros de opinión de la propia Junta de Andalucía han ido constatando en los últimos años esa difuminación de lo que antaño eran las fronteras blindadas del PSOE andaluz, y de la izquierda por extensión. ¿Significa esto que Andalucía se ha escorado sociológicamente a la derecha? Más bien que el centro se ha agrandado y que hay más electores dispuestos a votar a izquierda y derecha, según la ocasión.

Descrédito del PSOE

El barómetro periódico que elabora el Centro de Estudios Andaluces (Junta de Andalucía) constata esa realidad. El sondeo que hizo en marzo indicaba que el 54% de los andaluces se autocolocaban hacia la izquierda, frente a apena s un 42% que se declaraban escorados a la derecha del espectro político -un 4% no sabían o no contestaban-.

Según el barómetro de opinión de la Junta, los andaluces confían el doble en el PP que en el PSOE

Sin embargo, pese a que son más los andaluces con confesada querencia a la izquierda -más o menos moderada-, el PP ha pasado a ser el partido en el que más confían los andaluces para que le resuelvan los problemas, muy por delante de un PSOE cuyo crédito se ha hundido a la par que su electorado. Confían en el Partido Popular el doble que en el socialista.

En ese barómetro del pasado mes de marzo, a la pregunta de «¿qué partido político cree que puede dar una mejor respuesta a los problemas de España?», el 19,9% de los andaluces contestaban que el PP y un 13,6% que Vox, frente a solo un 12,7% que citaban al PSOE o al 4,4% que confiaban preferentemente en Podemos.

Esos porcentajes todavía son más acusados si la pregunta es sobre el partido en el que más confían para que Andalucía prospere: en ese barómetro de marzo, el 23% de los andaluces contestaban que el PP era la mejor opción, un 12,5% apostaban por Vox y un 12% por el PSOE. El resto de opciones obtenían un grado de confianza residual.

Es decir, una sociedad escorada a la izquierda como la andaluza se inclina mayoritariamente hacia la derecha por preferencia razonada. El pragmatismo ha vencido las barreras del dogma que antes blindaba al PSOE. Ese cambio ha convertido al PP en el partido hegemónico que, al mismo tiempo, ha frenado a Vox. En estas elecciones, los de Abascal y Olona han ganado 97.325 votos respecto a las autonómicas de 2018 -cuando estaban en pleno despegue-, pero han perdido 376.000 respecto a las generales de noviembre de 2019.

Artículo solo para suscriptores
Tu suscripción al mejor periodismo
Anual
Un año por 15€
110€ 15€ Después de 1 año, 110€/año
Mensual
5 meses por 1€/mes
10'99€ 1€ Después de 5 meses, 10,99€/mes

Renovación a precio de tarifa vigente | Cancela cuando quieras

Ver comentarios