El órdago de Elon Musk para acabar con el 'gratis total' en internet no es un farol
Los expertos creen que en un Twitter (ahora X) de pago es viable si se ofrece una propuesta de valor añadido, un fenómeno que es extensible al resto de servicios digitales ante el agotamiento del modelo basado en la publicidad
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Iniciar sesiónHan pasado dos años desde que Elon Musk, el hombre más rico del mundo, adquirió Twitter por unos 44.000 millones de dólares. Esa cantidad representa aproximadamente el 17% de su fortuna estimada en 259.600 millones de dólares. Desde que se completó la transacción ... en octubre de 2022, el magnate ha tomado una serie de medidas como despedir a una parte sustancial de los empleados de la compañía, eliminar la verificación gratuita para los usuarios famosos, restaurar cuentas suspendidas como la de Donald Trump y cambiar el nombre de la red social por X.
La última de estas decisiones transformadoras es la posibilidad de cobrar una pequeña tasa a todos los usuarios X, una idea que surgió durante una reunión en la que participó el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu. «Este tipo de medidas siempre funcionan igual, o al menos, siempre que el servicio prestado vale realmente la pena: en un principio, se forma un escándalo y muchísimas personas afirman que nunca pagarán por ese servicio, que se darán de baja, y que odian completamente a la compañía por plantear esa medida», dice Enrique Dans, profesor de IE University.
«A partir de ahí, el camino suele ser ascendente y tendente a una consolidación, para convertirse al cabo de un tiempo en un servicio mucho más saneado en cuanto a sus propuestas de valor. El éxito depende, por supuesto, de la naturaleza de esa propuesta de valor», explica Dans. En ese sentido, una medida que podría proponer para dar valor a la plataforma es una red social libre de publicidad, sin cuentas falsas, mejores protecciones para el spam o para controlar a los trolls. «Estoy seguro de que en no mucho tiempo, X funcionaría infinitamente mejor y tendría muchas posibilidades de ser un gran éxito», dice el experto.
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La propuesta de Musk forma parte de un cambio en internet que estamos viendo hacia el fin del todo gratis. Netflix ha limitado el uso compartido de cuentas, Spotify ha aumentado recientemente sus tarifas y ahora Twitter (X) quiere conseguir que más usuarios paguen por utilizar sus servicios. «El actual modelo, en el que la publicidad es la principal fuente de ingresos, muestra síntomas de agotamiento. Hace falta un cambio y, quizás, Musk esté en el camino de liderarlo», dice Pedro García Oliva, de ESIC Business & Marketing School.
Twitter tiene actualmente unos 528 millones de usuarios activos mensuales, por lo que cobrar una pequeña cantidad, como dijo Musk, de digamos un dólar al día representaría cobrar 528 millones más al mes. Esto supondría 6.336 millones de anules, una cantidad superior a los 4.400 millones de ingresos de la red social en 2022. «Las cifras que aquí se manejan son irrisorias en comparación con las que pueden llegar a obtenerse», dice García Oliva.
El experto de ESIC cree que, en caso de que se estableciera un modelo de pago obligatorio, al inicio podría darse una salida de usuarios de la plataforma. No obstante, si se da valor al pago es probable que la medida fuera un éxito. De momento, Musk ha creado un servicio de pago para conseguir la marca de verificación, además de acceso a otras funciones de Twitter (X), pero no ha tenido mucho éxito. «El porcentaje de usuarios que se ha decidido a abonarlo es reducido. Ahora parece que la propuesta supone que todos paguen, pero sin que se ofrezca algo más como contrapartida que una conversación con menos 'ruido', Silvia Martínez Martínez, profesora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Cerco a los 'bots'
Al decir que habría «menos ruido», la profesora hace referencia al hecho de que Musk propuso que el pago serviría para eliminar a los 'bots' y las cuentas falsas. «Los 'bots' representan un problema en las redes sociales, ya que pueden difundir desinformación. Si cobrar a los usuarios puede ayudar a combatir la presencia de 'bots' y mejorar la calidad de la plataforma, esta podría ser una propuesta atractiva para muchos», asegura en esta misma Diego Galizia, marketing manager de The Valley.
Sobre los retos de poner en marcha esta propuesta, Galizia cree que el principal es hacer frente al desafío de equilibrar la monetización con la preservación de la experiencia de usuario auténtica y libre de manipulaciones. «La principal oportunidad radica en el hecho de que la sociedad está cada vez más harta de publicidad hipersegmentada que les persigue. El reto fundamental, por supuesto, es sobrevivir la travesía del desierto que tiene lugar cuando muchos usuarios se dan de baja por no querer pagar, algo inherente a una cultura equivocada que, desde sus inicios, pretendía que en internet era todo gratis y no había que pagar por nada», asegura Enrique Dans, de IE University.
Como oportunidad para aumentar los ingresos, Martínez Martínez, de la UOC, señala que la enseña del pajarito azul (transformada ahora en X) tiene muchos años de servicio y muchas personalidades o empresas tienen una actividad significativa en la plataforma. En ese sentido, cree que hay un grupo de usuarios de Twitter que siempre se ha mantenido fiel a la plataforma a pesar de todos los cambios. «Pero llega un momento que puede no compensar mantenerse en la plataforma, en especial si esa comunidad migra a otros entornos», asegura.
Pagar al creador
Es importante tener en cuenta que la propuesta de cobrar a los usuarios se combina con otra recientemente puesta en marcha por Twitter (X) de pagar a determinados usuarios que generen contenidos, como ya está sucediendo con otro de los gigantes de las redes sociales, Youtube. «Me resulta coherente que se cobre a los usuarios y, a su vez, se recompense a creadores de contenido con notable impacto en términos de difusión. Esta es una progresión lógica en muchas redes sociales», dice Rodrigo Miranda, managing partner de ISDI.
Más allá de los cambios de Twitter (X), la realidad es que cada vez vemos más plataformas que exploran formas de involucrar a sus usuarios. Y puede ser que Elon Musk esté liderando el camino en el mundo de las redes sociales. «Se nos viene un cambio en el modelo de negocio de las redes sociales, que busca hacerlas sostenibles. Es posible que Musk esté iniciando un camino, pero pronto le acompañarán otros jugadores del mercado», dice García Oliva, de ESIC. Musk propone, y con más sentido empresarial del que podría parecer, pero serán los usuarios los que terminen por disponer el futuro de las redes sociales e internet.
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