Reforma de pensiones
Feijóo desactivará la espiral de subidas de cotizaciones de Escrivá
Adelantaría la auditoría de las cuentas de la Airef a este año antes de tomar cualquier decisión, que tendrá que negociar con Bruselas si gobierna
Tendría margen porque Europa no analizará los cambios del ministro hasta que España pida los 10.000 millones del cuarto tramo de los fondos
El gasto mensual en pensiones se dispara casi un 11%, el mayor ritmo desde los años 90
La herencia que dejará Pedro Sánchez si pierde las elecciones del 23J incluye también la reforma de pensiones, una de las más polémicas de la legislatura que aún debe pasar el filtro de Bruselas. Los cambios comprometidos en la Seguridad Social van ... ligados a 10.000 millones, los que se corresponden con el cuarto pago de los fondos europeos que la vicepresidencia Nadia Calviño aún no ha reclamado, pese a insistir desde diciembre, cuando se aprobó la reforma, en que sí lo haría.
Por los tiempos, no es previsible ya que la responsable económica reclame la nueva partida de los fondos y si lo hace, el análisis de Bruselas de la reforma llegará tras el 23J, lo que quiere decir que será el Gobierno que salga de las urnas el que tenga que enfrentarse al veredicto de las autoridades europeas. Favorito en las encuestas, todo apunta a que será el PP el que tenga apechugar con una reforma que ha sido muy cuestionada por el mundo académico y por los principales organismos como la Airef, el Banco de España, BBVA o Fedea. Todos coinciden en que no garantiza la sostenibilidad el sistema.
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Empresas y fondos esperan un cambio político que haga más favorable la inversión
Los expertos señalan que las restricciones de la ley de vivienda ahuyentan y retienen operaciones
La reforma de las pensiones será, por tanto, una de las herencias envenenadas que recibiría un Gobierno del PP al que, además, le tocaría pedir el cuarto tramo de los fondos y hacer frente al examen europeo de unos cambios que los populares quieren modificar, en especial la espiral de subida de cotizaciones que incluye, al menos en parte. Como la CEOE rechazan que sean los salarios altos y las empresas los que tengan que cargar con el peso de pagar las pensiones. Pero antes de tomar cualquier decisión, en los planes del equipo económico que desde Génova diseña el programa electoral estaría adelantar a este mismo año la auditoríade la Autoridad Fiscal prevista en la reforma de Escrivá para 2025 para conocer la situación de la caja de las pensiones.
Una estrategia que va en línea con la auditoría en profundidad de los gastos del Estado prevista por los populares en los primeros 100 días de gobierno y como base para un plan fiscal a cuatro años orientado a conducir las cuentas públicas hacia un entorno de sostenibilidad como ya exige Bruselas.
Recorte de prestaciones
El principal partido de la oposición votó en contra de la convalidación del Real Decreto-ley de reforma por considerar que abre la puerta a rebajar las pensiones, dada la espiral de gasto que lleva asociada que, en ningún caso, se acompasa con los ingresos previstos por el Gobierno. Ello pese a la triple subida diseñada por el ministro Escrivá a la que tendrán que hacer frente las empresas y los trabajadores, una escalada aprobada al margen de la patronal que marcó un antes y un después en las relaciones entre las empresas y el Ejecutivo, ahora totalmente rotas.
Cotizaciones sociales de las empresas
En % del PIB. Datos 2021
10,7
España 2050*
10,4
Rep. Checa
10,4
Estonia
10,1
Francia
10,0
España
9,5
Rep. Eslovaca
Italia
9,0
7,7
Bélgica
7,3
Finlandia
7,2
Austria
7,1
Alemania
7,0
Letonia
6,4
Portugal
6,4
Suecia
6,2
Japón
5,9
Eslovenia
5,8
Grecia
5,6
Noruega
5,6
UE
5,3
P. Bajos
Polonia
4,9
4,7
Hungría
4,5
OCDE
4,3
Luxemburgo
3,9
R. Unido
3,7
Turquía
EE.UU.
3,1
3,1
Suiza
2,6
Canadá
2,0
Irlanda
Lituania
0,7
0,0
Dinamarca
Fuente: IIE/ ABC
Cotizaciones sociales
de las empresas
En % del PIB. Datos 2021
10,7
España 2050*
10,4
Rep. Checa
10,4
Estonia
10,1
Francia
10,0
España
9,5
Rep. Eslovaca
9,0
Italia
7,7
Bélgica
7,3
Finlandia
7,2
Austria
7,1
Alemania
7,0
Letonia
6,4
Portugal
6,4
Suecia
6,2
Japón
5,9
Eslovenia
5,8
Grecia
5,6
Noruega
5,6
UE
5,3
P. Bajos
4,9
Polonia
4,7
Hungría
4,5
OCDE
4,3
Luxemburgo
3,9
R. Unido
3,7
Turquía
3,1
EE.UU.
3,1
Suiza
2,6
Canadá
2,0
Irlanda
0,7
Lituania
0,0
Dinamarca
Fuente: IIE/ ABC
Según el Banco de España, la triple subida de cuotas incluida en la segunda fase de los cambios prevé elevar los ingresos de la Seguridad Social un 0,6% del PIB en 2030 y un 0,9% en 2050, por debajo del 1,1% estimado por el Gobierno para ese último ejercicio. Los cálculos del supervisor coinciden con los análisis críticos de la Airef y Fedea. La proyección del organismo que dirige Pablo Hernández de Cos no tiene en cuenta el efecto que el aumento de los costes laborales podría tener sobre el empleo y los salarios, por lo que advierte de que la capacidad recaudatoria de la reforma podría ser incluso menor a la prevista.
La reforma contempla un aumento de las cotizaciones por tres vías: subida de las bases máximas de cotización por encima del repunte de los precios entre 2024 y 2050; una cuota de solidaridad para la parte de los salarios más altos que no cotiza a la Seguridad Social, que entrará en vigor en 2050, y la sobrecotización que establece el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) entre 2023 y 2050 y que se dobla desde 2029.
Una losa para los jóvenes
Este mecanismo, que sustituyó al derogado factor de sostenibilidad del PP, ha sido duramente criticado por el mundo académico, que ya ha avisado de que traspasa una parte del mayor coste de la jubilación a los jóvenes, a los que se condena a afrontar los años de tensión financiera que tendrá el sistema debido a la jubilación de los 'baby boomers'. Un peso añadido para una generación ya castigada por la precariedad laboral y salarial.
Muy pocos detalles han trascendido de cuál es el rumbo que tomará la reforma alternativa que busca aplicar el equipo de Feijóo si llega a La Moncloa, salvo que el objetivo es generar hasta 1,7 millones de empleos más si llegan al Gobierno, lo que se traduciría en 16.000 millones en cotizaciones sociales. Pero si algo está más o menos claro es que los populares no aumentarían la edad de jubilación, ahora en 67 años, y que mantendrá la revalorización de las pensiones con el IPC, un acuerdo al que llegaron los miembros del Pacto de Toledo y que el PP rechazó cuando la medida fue incluida en la ley por no estar en sintonía con el rumbo de la misma. Mantendrán está indexación pero sí aseguran que buscarán fórmulas para ampliar el periodo de cálculo de las pensiones de forma voluntaria, recuperar incentivos fiscales para los planes de pensiones y un impulso al retiro parcial, además de ahorrar en el gasto institucional. Volverán, por ejemplo, a unificar los ministerios de Trabajo y Seguridad Social, partido en dos por las exigencias de Podemos.
Estos ahorros irían en la dirección marcada por organismos como el Instituto de Estudios Económicos, el 'think tank' de la CEOE, que ha calculado que España podría reducir su gasto público en un 14%, unos 60.000 millones de euros, sin rebajar la calidad de los servicios que presta gracias a la mejora de la eficiencia del gasto.
Mantener la revalorización de las nóminas con el IPC e incentivar las jubilaciones parciales están entre los planes del PP
En los planes iniciales del ministro de Seguridad Social estaba un incremento del período de cómputo de 25 a 35 años. El choque con Podemos hizo que Escrivá reculara y propusiera elevar a 30 años el cálculo de la pensión. La propuesta tampoco tuvo éxito por los recortes de pensión que llevaba implícita la medida, y el titular de la Seguridad Social se encontró con el portazo, de nuevo, del socio minoritario de la coalición. La propuesta final, lejos de los planes iniciales, permite elegir al trabajador entre los 25 años actuales o 29, pudiendo en este caso descartar los dos peores para el cálculo de su jubilación.
Campeón en cuotas
A la espera de las medidas que adopte el nuevo Gobierno, la reforma de José Luis Escrivá afianza a España como uno de los países donde más cotizaciones sociales se pagan en el mundo. Antes de la reforma, nuestro país ya partía de unas cotizaciones sociales de las más elevadas de la UE y la OCDE. En la actualidad, las cotizaciones sociales de las empresas equivalen al 10% del PIB, el cuarto país de Occidente. Esta cifra aumentaría hasta el 10,7% en 2050, frente al 5,6% de la UE y el 4,5% de la OCDE, según los datos aportados por el servicio de estudios de la organización empresarial.
El IEE ha advertido de que la reforma del pensiones y la consecuente subida de las cotizaciones sociales tendrá un efecto negativo sobre el empleo equivalente a entre 100.000 y 190.000 puestos de trabajo a tiempo completo, y causará también una caída del PIB del 0,6%. Además, en el caso de los escenarios más adversos, «los efectos serían entre dos y tres veces superiores», por lo que podría afectar a hasta 570.000 empleo. Ahora las empresas miran a Feijóo con la esperanza de que revierta la espiral de cargas.
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