La anécdota de Lagarde con el hijo que no siguió sus consejos: «Invirtió en criptomonedas y lo perdió todo»

En un acto con jóvenes organizado por el Bundesbank alemán, Lagarde ha respondido a las dudas que se le planteaban sobre las criptomonedas y ha querido subrayar el consejo de mantenerse alejados de ellas con una anécdota familiar. Uno de sus hijos invirtió dinero en criptomonedas, a pesar de las advertencias de su madre, y perdió casi toda su inversión. Lagarde tiene dos hijos ya adultos y no ha aclarado cuál de ellos está lamentando las pérdidas.

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«Me ignoró soberanamente, lo cual es su privilegio», ha reconocido la presidenta del BCE, «y perdió casi todo el dinero que invirtió». «Pero no fue una cantidad muy grande», ha relativizado el error. Como todas las madres, Lagarde no se resistió al «ya te lo dije». «Cuando tuve otra conversación con él al respecto, aceptó de mala gana que yo tenía razón», ha añadido con cierta satisfacción.

«Como pueden ver, tengo una opinión muy baja sobre las criptomonedas», siguió recomendando a los jóvenes, «cada uno tiene derecho a invertir su dinero donde quiera y cada uno puede especular tanto como quiera. Pero nadie debería tener derecho a participar en comercios o negocios sancionados penalmente». Esta última frase es su argumento para una fuerte regulación de las criptomonedas, para proteger a los consumidores y prevenir actividades delictivas como el lavado de dinero y la financiación del terrorismo, por la que largamente ha abogado.

La Unión Europea se convirtió el año pasado en la primera región económica importante en acordar una regulación de las criptomonedas, denominada Mercados de Criptoactivos (MiCA), que entró en vigor en junio. Sin embargo, se espera que la implementación completa del reglamento se prolongue hasta finales de 2024. Desde el punto de vista de Lagarde, el reglamento MiCA debería ser sólo un primer paso. Los cinco países europeos en los que más se invierte en criptomonedas son, por este orden: Ucrania, Turquía, Rusia, Reino Unido y España.