Zapatero eleva la garantía de los depósitos y crea un fondo de 30.000 millones para financiar empresas
El Presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado hace unos minutos la creación de un fondo con cargo al tesoro de 30.000 millones de euros -ampliables hasta un máximo de 50.000 millones de euros- para garantizar la financiación de empresas ... y ciudadanos.
El anuncio se producía mientras los ministros de Economía de la Unión Europea, el Ecofin, decidían en Luxemburgo elevar el mínimo de capital garantizado de los depósitos garantizado de los actuales 20.000 euros que marca la Directiva a 50.000 durante un año. Esta nueva cantidad, que se traducirá próximamente en una nueva Directiva que seguirá el procedimiento para ser definitivamente aprobada es sólo un mínimo ya que muchos países europeos, entre ellos España, decidieron ayer doblar esa cantidad y llegar a los 100.000 euros para dar más garantías a los ahorradores.
La razón de fondo de que los Veintisiete no acabaran la reunión del Ecofin en Luxemburgo con un acuerdo general para extender el mínimo de depósitos bancarios garantizados en Europa a los 100.000 euros estriba en que muchos países pequeños, y con bancos del mismo tamaño, consideraban totalmente excesiva la mencionada cantidad, lo que imposibilitó llegar a un acuerdo general. "Lo que parece grande para unos para otros en gigante", aseguró en rueda de prensa la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, y Presidenta del turno del Ecofin.
Los ministros de Economía de Europa han vuelto a reiterar el mensaje de que dada la crisis financiera sin precedentes que vive Europa la única respuesta posible pasa por la unidad pero, a diferencia de la mini-cumbre de París organizada el pasado sábado en Bruselas por el Presidente francés Nicolas Sarkozy, aprobaron medidas concretas.
La primera de ellas es que, en aras de restablecer la confianza en los mercados financieros, los países europeos saldrán al rescate de cualquier entidad bancaria que se encuentre en riesgo de quiebra sobre todo para proteger a los ahorradores. Harina de otro costal son los directivos de estas entidades que se declaren en quiebra, para los que Europa no tendrá piedad. La idea es que si un Estado tiene que entrar en el capital de un banco para salvarlo de la quiebra, como ha ocurrido recientemente en Fortis o en Dexia, el Estado en cuestión tendrá derecho a cambiar a sus directivos así como a fijar su sistema de remuneración "ya que no hay que amparar las políticas de obtener beneficios a corto plazo par obtener beneficios suculentos", aseguró Lagarde.
En materia de liquidez los Veintisiete han vuelto a renovar el encargo al presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, de que siga inyectando el dinero necesario en el mercado interbancario para que no falle el sistema. Trichet explicó ayer por la noche tras la reunión de los ministros del euro, el Eurogrupo, que "estamos preparados como hasta ahora para darle al mercado la liquidez que necesita durante el tiempo que sea necesario. Iremos tan lejos como sea necesario ya que es el momento de la sangre fría y de la confianza".
A lo anterior se le añadirán cambios en el sistema de contabilidad de las entidades financieras de modo que esté menos sujeto a los vaivenes del mercado y no pierdan ventaja competitiva respecto a sus homólogas norteamericanas. Además, la UE ha pedido a los bancos que aclaren lo más rápidamente posible las cuentas correspondientes al tercer trimestre del año para que se sepa cuanto antes el impacto real que la crisis ha tenido en sus balances en materia de deuda y pasivo, entre otros.
Por su parte el comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, ha asegurado que el objetivo final de toda esta batería de medidas es "coordinar las decisiones para poder reforzarnos ya que la crisis es global y, sobre todo, hay que evitar riesgos sistémicos para evitar los impactos negativos en la economía real".
Sobre el posible impacto negativo que las nacionalizaciones de bancos puedan tener en la normativa sobre mercado interior tanto al comisaria de Competencia, Neelie Kroes, como su colega de Mercado Interior, Charlie McCreevy, que asistieron también a la reunión de Luxemburgo, explicaron que su intención es estudiar las posibilidades de adaptar los rescates bancarios, aunque tengan carácter temporal, a la normativa europea para reducir su impacto en las reglas de libre competencia.
En cuanto al Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que es la base del euro, todos los miembros del Ecofin coincidieron en que su actual formulación de rigor presupuestario "flexible" para adaptarse a las zonas bajas del ciclo es suficiente para afrontar la situación actual.
Noticias relacionadas
- Los 27 piden indemnizar los despidos de directivos según sus resultados
- El Banco de España asegura que «en estos momentos nada pone en riesgo los ahorros» de los españoles
- Limones, aceite y harina suben entre un 48% y un 28% en un año
- Incertidumbre en las Bolsas. Sigue en directo las cotizaciones
- Banesto aumentó su beneficio un 12%
- Sin acuerdo en la UE para regular la solvencia de las aseguradoras
Ver comentarios