Ahorro Privado
Escrivá no logra engatusar a las pymes para el fondo público de pensiones por la falta de incentivos fiscales
Los expertos avisan de que la as para cumplir los objetivos fijados
El Gobierno tendrá difícil alcanzar los objetivos que se marcó a medio plazo con la aprobación del fondo público de pensiones. Ni los 10 millones de ocupados inscritos ni los 300.000 millones de euros de patrimonio gestionado en los nuevos planes de empleo de promoción pública ... llegarán a captarse por la nula oferta de incentivos fiscales, que limita el atractivo del instrumento, según explican a ABC expertos en el sector de ahorro privado.
Por un lado, en España , más del 90% del tejido societario son pymes, mientras que la adhesión a estos fondos de pensiones supondrá un inevitable incremento de los costes laborales para el empleador que aporte a cuenta del trabajador en su plan de ahorro, y una rebaja del salario neto del empleado al descontar la aportación mensual a su plan de pensiones.
«Si no hay incentivos fiscales nos podemos olvidar de impulsar el segundo pilar de ahorro para la jubilación», señala Fernando Ariza , director general adjunto de Mutualidad de la Abogacía. Cabe recordar, que uno de los puntos que la CEOE ha criticado del proyecto de ley impulsado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones es la ausencia de cualquier tipo de desgravación en el Impuesto de Sociedades, que sí estuvo vigente en la regulación hasta el año 2013, cuando se eliminó esta ventaja tributaria para el empleador.
«El tejido empresarial en España es particular. El 70% de los empleados están contratados por pymes. Necesitan un incentivo fiscal potente para entrar al plan, al final se trata de salario diferido y un aumento de costes para las empresas», señala Ariza.
En este sentido, augura el experto que la falta de estos incentivos tributarios -el proyecto de ley sí recoge exenciones en cuota de Seguridad Social hasta un máximo de 115 euros al mes por trabajador en sus aportaciones, lo que implicaría un ahorro anual en la cotización para la empresa de unos 400 euros al año por asalariado- dependerá en buena medida de la mejora de la oferta de incentivos fiscales, pero también de la incorporación de elementos de obligatoriedad para aportar al plan de pensiones, tal y como ocurre con el sistema de pensiones de empleo de Reino Unido , donde los empresarios británicos están obligados a inscribir automáticamente a todos sus empleados y son estos los que deben pedir expresamente abandonar el plan en caso de rechazarlo.
«Pierde capacidad de captación» , apunta Ariza asegurando que sin la adscripción automática y sin incentivos «no confío en el éxito del plan».
Alternativa de ahorro
En este punto, los expertos consultados afirman que se trata de un proyecto con un gran potencial, más aún en España donde la previsión social complementaria no cuenta con un desarrollo significativo como complemento. «Este instrumento contribuirá al crecimiento del segundo pilar ya que permitirá integrar en el mismo a empresas de pequeño tamaño e individuos, como los trabajadores que cotizan en el RETA , que a día de hoy estarían fuera de este segundo pilar, entre otras cosas, por los requisitos y trámites que exige la ley para crear un plan de pensiones del sistema de empleo», explica el director responsable del área de Pensiones de KPMG Abogados, Álvaro Granado .
«Este fondo público, que supondrá un alivio en relación con estos trámites, potencialmente será un buen instrumento para dar cobertura a un elevadísimo número de empresas y colectivos de trabajadores autónomos . Sin embargo, deberá ir acompañado de otras medidas o incentivos para atraer a todo ese potencial colectivo de empresas que están en la actualidad fuera del marco de la previsión social colectiva», añade el experto.
Incentivo fiscal de aportaciones
a planes de pensiones para contribuyentes
en la media de ingresos en 2018
% del valor de las aportaciones
Por debajo de la media
Por encima de la media
27,9 media OCDE
27,9 media OCDE
27,0 media UE
27,0 media UE
Suecia
Nueva Zelanda
Chile
Grecia
Austria
España
Bélgica
Polonia
Corea
Finlandia
Lituania
Alemania
Reino Unido
Dinamarca
Portugal
Australia
Canadá
Suiza
Estonia
Francia
Noruega
Italia
Hungría
Islandia
Turquía
Japón
Luxemburgo
Rep. Checa
Eslovenia
Eslovaquia
Estados Unidos
Holanda
Lituania
Irlanda
México
Israel
8,3
28,2
28,6
9,6
11,9
28,9
30,1
12,2
30,2
15,3
16,3
30,6
16,4
31,0
16,6
32,7
34,6
19,7
19,7
36,1
20,4
36,5
40,9
21,3
23,7
48,1
23,8
49,1
24,8
50,8
25,0
51,2
25,2
52,7
26,0
26,3
Fuente: IEE y OCDE / ABC
Incentivo fiscal
de aportaciones
a planes de pensiones
para contribuyentes en
la media de ingresos
en 2018
% del valor de las aportaciones
27,9 media OCDE
27,0 media UE
Suecia
Nueva Zelanda
Chile
Grecia
Austria
España
Bélgica
Polonia
Corea
Finlandia
Lituania
Alemania
Reino Unido
Dinamarca
Portugal
Australia
Canadá
Suiza
Estonia
Francia
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Italia
Hungría
Islandia
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Rep. Checa
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Eslovaquia
Estados Unidos
Holanda
Lituania
Irlanda
México
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8,3
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15,3
16,3
16,4
16,6
19,7
19,7
20,4
21,3
23,7
23,8
24,8
25,0
25,2
26,0
26,3
28,2
28,6
28,9
30,1
30,2
30,6
31,0
32,7
34,6
36,1
36,5
40,9
48,1
49,1
50,8
51,2
52,7
Fuente: IEE y OCDE / ABC
Además, Granado argumenta que el proyecto de ley resuelve el problema administrativo y permitirá que de una manera ágil las empresas de cualquier tipo y tamaño puedan acceder a un plan de pensiones del sistema de empleo. Si bien, señala que la clave para que el nuevo sistema tenga éxito podrá estar en los incentivos que tengan las empresas y colectivos o asociaciones de trabajadores para realizar aportaciones al plan de pensiones.
«Los incentivos fiscales en forma de deducciones impositivas suelen resultar atractivos a los aportantes, por lo que la introducción de este tipo de incentivos, unido a la eliminación de trámites y procesos en la creación de los planes, podrá suponer una mezcla de éxito para alcanzar el objetivo que persigue esta norma: crecimiento y desarrollo del segundo pilar de previsión social », apunta el experto.
«Será una buena opción para cualquier tipo de compañía, siempre que vaya acompañada de incentivos que resulten atractivos a quien vaya a realizar las aportaciones», concluye Granado en valoraciones para ABC argumentando que la volatilidad o el tamaño de la empresa, realmente no debería ser un condicionante pues las aportaciones realizadas, permanecerán en el fondo de pensiones o se podrán movilizar a otros fondos en supuestos de cambio de empresa o sector.
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