Los bancos piden al gobernador que deje de hablar y actúe ya

Durante su intervención en el XVII Encuentro del Sector Financiero, recordó que cuando se inició la crisis mundial en nuestro país se decía que las cuentas públicas estaban saneadas y el sistema financiero era sólido. «Ahora tenemos un déficit del 11,4%, pero la banca sigue saneada. Eso no quiere decir, que determinadas entidades tengan dificultades de liquidez y solvencia», añadió. A su juicio, esas entidades hay que reestructurarlas antes de que se ponga de relieve públicamente de que son débiles para no generar alarma y, como consecuencia, que se deteriore el mercado. Las autoridades tienen que decidir hacer saneamientos que no sean de «pacotilla», sino que garanticen su funcionamiento en el futuro. «Las entidades en crisis tienen que desaparecer o diluirse en otras», recalcó.

A su modo de ver, la nueva regulación financiera tiene que tener como objetivo evitar que se repita la crisis, que no haya crisis sistémicas, pero las entidades por sí solas deben poder caer o de lo contrario se estaría adulterando el mercado.

Miguel Martín acabó dieciendo que «las palabras ya no sirven» y que el mejor Fondo de Reeestructuración Bancaria Ordenada (FROB) «que se nos puede ocurrir es una política económica que potencie el crecimiento». Un programa económico que dé confianza y credibilidad y no que produzca incrementos del paro, finalizó.